César Santiso: «A Coruña lo tiene todo para llamar la atención de inversores de China»

Durante cuatro años fue el azote del gobierno local desde la oposición, un mandato en el que destacó también su capacidad negociadora y su talante conciliador. Esto le ha llevado a César Santiso hasta China, de donde acaba de regresar de acompañar al Victoria C. F., que han jugado un partido en un intercambio sociocultural y deportivo que, asegura el exconcejal de Esquerda Unida, es el primer paso de unas relaciones que pueden reportar muchos beneficios para la ciudad.

-¿Qué tal la experiencia?

-Fue algo espectacular desde el primer entrenamiento, previo al partido. Fuimos recibidos en el estadio por cientos de personas, parecía una final de un campeonato oficial. Y al terminar el entrenamiento la gente invadió el campo, les pidieron fotos y autógrafos a los chavales del Victoria... Y al día siguiente, en el partido que les enfrentó a la selección de Fuzhou, se llenó el estadio con miles de personas. El encuentro fue televisado y se colgó en Internet. En unos días ya tenía 160.000 visitas. Generó una expectación enorme. Y los jugadores del Victoria dieron una lección de fútbol, que ganaron 1 a 0, y también de valores y comportamiento. Son unos fenómenos, y su presidente un embajador excepcional de la ciudad.

-¿Cómo surge esta oportunidad?

-Es una actuación en la que no hay ánimo de lucro por ninguno de los lados. Surgió gracias a una empresa que se llama Xokolet Solutions, afincada en la provincia de A Coruña, que se dedica desde hace años a facilitar tratos comerciales con China. En noviembre del año pasado, una empresa participada por los entes públicos de la provincia de Fujian que se llama Passionate Sport, les ofreció organizar un intercambio cultural y deportivo. En un primer momento se pensó en hacerlo con equipos de Madrid o Barcelona, pero contactaron conmigo porque pensaron que podría ayudar a encauzar el proyecto. Y ya desde el primer momento intenté traerme el tema para casa.

-¿Y aceptaron que el intercambio fuese con un equipo de A Coruña?

-Aceptaron porque les mostramos lo necesario que es el deporte base, que es la manera de generar cultura deportiva. El fútbol, como vía de apertura a occidente, se ha convertido en China en una cuestión de estado, es asignatura obligatoria en los colegios, pero no tienen tradición futbolística. Lo han intentado con carísimos centros de alto rendimiento, pero el fútbol no funciona así. Ese es en gran medida nuestro cometido, mostrarles cómo lo hacemos aquí. Y qué mejor que un equipo con 75 años de historia como el Victoria para iniciar las relaciones. El fútbol ha sido la puerta de entrada, lo que nos ha permitido mostrarles lo que era Galicia y, particularmente, A Coruña, y se quedaron maravillados.

-¿Qué puede ofrecerle A Coruña a China?

-A Coruña lo tiene todo para llamar la atención de inversores chinos. En el caso que nos toca, estamos hablando de una provincia, Fujian, en la que no hay presencia occidental y que tiene un crecimiento enorme. Quien no tenga claro que el partido a nivel económico se está jugando ahora en China es que no se entera de nada. Hay muchas posibilidades. En nuestra visita ya hablamos de intercambios turísticos, que sería algo muy beneficioso para nosotros porque la clase media china es enorme y tiene un poder adquisitivo elevado, pero los productos occidentales, que son muy demandados, tienen unos aranceles que los hacen prohibitivos. También podríamos aportar mucho en economía verde, porque es una región parecida a la nuestra pero con más problema de contaminación.

 «Veo a la gente decepcionada con la labor del gobierno local»

Santiso lleva años alejado del primer plano de la política, aunque le puede la preocupación por su ciudad.

-Esto le ha supuesto una especie de regreso a la vida pública.

-Acepté porque, aunque he abandonado la política activa, mi vocación de servicio público sigue intacta. Así que en todo en lo que pueda echar una mano a mi ciudad y mi provincia, ahí estaré. Y este es un ejemplo claro de algo que puede reportar mucho beneficio para A Coruña.

-¿Echa de menos sus labores como azote del gobierno local?

-En absoluto, aunque es cierto que lo que observo a veces me da ganas de volver para poder mejorar la ciudad y la vida de los coruñeses. Vivo mucho mejor alejado de la política activa, incluso hay gente que me dice que he rejuvenecido. Ahora dispongo de tranquilidad y tiempo para mí, lo que me permite disfrutar de la familia y de las amistades, que son lo más valioso para mí. Estoy encantado de implicarme en proyectos como este de China, pero ahora los tiempos los marco yo, lo que me permite ser dueño de mi vida.

-¿Y cómo le parece que lo está haciendo el actual gobierno local? Ahí está metido su grupo político...

-Veo a la gente decepcionada con su labor. Creo que las cosas se tienen que hacer muchísimo mejor. Necesitamos un proyecto de ciudad que cubra realmente las necesidades de la mayoría social, un cambio de rumbo en las políticas de promoción económica, porque no se está trabajando absolutamente nada en el cambio de modelo productivo ni en economía verde... Se iban a cambiar muchas cosas, pero por ahora, nada.

-Le veo desencantado...

-Para estar satisfecho se debería estar haciendo mucho más.

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