Puertos del Estado y el ADIF pagarán los 140 millones de euros del tren a Langosteira

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CARLOS FERNANDEZ SOUSA

El plazo de ejecución de las obras podría exceder los 50 meses por los trabajos en los túneles

03 abr 2018 . Actualizado a las 10:03 h.

Con el proyecto de trazado aprobado y con el de ejecución previsto a corto plazo, lo que quedaba por saber sobre la conexión ferroviaria del puerto exterior era lo más importante: quién la iba a pagar. La incógnita la despejó ayer el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien anunció que la factura, de casi 140 millones de euros, la abonarán dos organismos públicos dependientes del Ministerio de Fomento: el ADIF y Puertos del Estado. Cada uno de ellos se hará cargo de la mitad de la cuenta, permitiendo con esa inversión que Langosteira pueda alcanzar su operatividad plena. 

Consecuencias

Adiós al carbón. Sin tren en Langosteira no resulta posible retirar de los muelles interiores de la ciudad tráficos que hoy circulan sobre raíles. El más importante de ellos es el de carbón para Meirama, que discurre actualmente a través de San Diego. Con el tren operativo en Langosteira ese producto podrá cambiar de puerto.  

Plazos

A más túneles, más dudas. El proyecto contempla un plazo de ejecución máximo, solo de los túneles, de 50 meses. De las cuatro alternativas que se estudiaron se optó finalmente por una de las dos con mayor recorrido bajo tierra. De los 6,55 kilómetros de nuevo trazado, un total de 5.186 metros irán por túneles. Es más cara que otras que no obligan a horadar, pero también tienen una mayor afección sobre la superficie. El proyecto de trazado, con todo, recuerda que «las obras subterráneas tienen mayor incertidumbre constructiva cuanto mayor es su longitud». Es decir, que una cosa son los 50 meses previstos y otra cosa el tiempo real de los trabajos, que puede irse más allá si durante las perforaciones aparecen obstáculos imprevistos.  

Presupuesto

Lo más caro, bajo tierra. Lo más costoso del nuevo trazado ferroviario serán los túneles. Ellos solos se llevan bastante más de la mitad de los fondos. Son tres y suman 91,7 millones de euros. El más largo mide 3.687 metros y los otros dos, 836 y 663 metros respectivamente. Las instalaciones y la electrificación componen la siguiente partida más importante, suman 8 millones de euros. A todo ello hay que sumarle el millón ya invertido por el Puerto en el proyecto de trazado.  

Tres tramos

Conexión con la red. Las obras consistirán en la construcción de una nueva línea férrea que unirá el puerto exterior con las vías ya existentes. Lo hará mediante una bifurcación, en Y, que permitirá a los trenes dirigirse hacia Santiago y hacia A Coruña. La parte más costosa serán los 98 millones de la línea principal desde Langosteira. La bifurcación hacia A Coruña costará casi 21 millones y la de Santiago, otros 19 millones de euros.  

Polígonos

Pocomaco y Vío. El desvío de los trenes hacia A Coruña se hará a la altura de Pocomaco, donde las obras no afectarán a la estructura de la superficie empresarial existente. El ramal a Santiago sí obligará a cambiar un vial en el cercano polígono de Vío, por donde pasará, aunque esa superficie apenas se ha desarrollado y no supondrá interferencia en las actividades empresariales. En el entorno de esos dos polígonos podría situarse -si no se prescinde de ella- una futura terminal de contenedores como la existente en la actualidad en San Diego, completamente infrautilizada desde que Renfe decidió prescindir de las líneas regulares multicliente.  

Inicio de las obras

Aún sin fijar. El comienzo de las obras del tren difícilmente se verá durante el actual mandato. El anuncio del presidente del Gobierno todavía hay que plasmarlo por escrito y, sobre todo, asignarle la partida presupuestaria correspondiente. Difícilmente aparecerá en los próximos Presupuestos Generales del Estado y lo más probable es que haya que esperar hasta el 2019 para ver una primera aportación estatal. Además, falta por presentar el proyecto de ejecución. Tras él, con los fondos consignados, se pondría en marcha una licitación larga y compleja de las obras, con múltiples trámites que seguramente demorarán la firma del contrato casi un año. Los grandes contratos deben ser publicados en los boletines nacionales y europeos y los procedimientos ofrecen largos plazos para presentación de ofertas y recursos.  

Crecimiento

Más mercancías. El estudio sobre el tren especifica las potencialidades del puerto exterior tras las obras. Según el estudio realizado, en el año 2037 están asegurados unos movimientos anuales de 2,5 millones de toneladas, con la posibilidad, indica el documento, de captar 1,3 millones más con nuevos tráficos. Los productos que permitirían estos crecimientos son el bioetanol, los cereales y el carbón.  

Puerto Interior

Mudanza empresarial. Desde la puesta en funcionamiento de Langosteira en el 2012, la migración de empresas desde los muelles interiores no ha dejado de crecer. El tren permitirá acelerar ese proceso y culminar los traslados más importantes, lo que facilitarán que los muelles interiores vayan quedando libres y que se integren en el urbanismo de la ciudad, con unos usos aún por decidir.