El gobierno local solo hizo 10 obras en áreas infantiles en casi tres años

En los dos años y nueve meses que han transcurrido desde que empezó el mandato, el gobierno local hizo obras en diez parques infantiles. La cifra fue esgrimida en el pleno de este mes por la concejala de Medio Ambiente, María García, para contestar a las críticas del PP por el «abandono de los barrios». La concejala enumeró algunos de los lugares donde están esas zonas de juego: «Campanario, Matogrande, [plaza] Pablo Iglesias, Ramón de la Sagra, Los Rosales, Tolerancia e Isaac Díaz Pardo».

Además, explicó que hay otra obra en ejecución en la plaza de Recife, y anunció que están previstas otras en las Conchiñas, el barrio de las Flores, las Pajaritas, Pedralonga o la plaza Elíptica.

Pero esas diez reformas ejecutadas en casi tres años de mandato suponen que el Ayuntamiento ha mejorado menos del 10 % de la red de juegos infantiles, ya que la ciudad cuenta con más de cien áreas destinadas a ese uso. Este periódico ha recibido quejas por el estado de muchas de ellas como la de las Pajaritas, el laberinto vegetal del monte de San Pedro o la de As Xubias de Abaixo.

Además, el ritmo de ejecución de una obra cada tres meses y pico es muy inferior al registrado en anteriores mandatos. Solo en el 2012 el Ayuntamiento intervino en doce áreas infantiles, dos más que en los últimos dos años y nueve meses. La diferencia es aún mayor si la comparación se establece con el año 2013, cuando se reformaron 34 áreas infantiles.

García también citó las obras de pavimentos para intentar desmontar las críticas del PP. Señaló que desde mayo del 2015 se hicieron 87 obras y hay otras 11 en ejecución. De nuevo, esas cifras suponen un porcentaje reducido del total de calles de la ciudad, que supera el millar. Las cifra de obras ejecutadas por el área de Infraestructuras también es inferior a la registrada antes: en el 2016 se hicieron 24, frente a 38 del 2014 y a 54 del 2013.

García concluyó su réplica acusando a la oposición de dificultar el trabajo del Ayuntamiento al bloquear los presupuestos. Su discurso no convenció al PP, que ha mantenido sus críticas al abandono de los barrios. Pero tampoco convence al PSOE. 

El PSOE ve un parálisis total

Su portavoz, José Manuel García, acusó ayer al gobierno local de tenerlo «todo paralizado». Estamos ante «una paralización importantísima», criticó al tiempo que calificó la situación de «preocupante». García recordó que el bloqueo del presupuesto no existe. Su partido apoyó la aprobación de las cuentas de la Marea casi sin condiciones, y los presupuestos están en vigor desde el pasado 7 de febrero. Sin embargo, desde entonces, «no se ha hecho nada», remachó el concejal del grupo socialista.

En los 35 días que han transcurrido desde que se publicaron los presupuestos, el gobierno local ha licitado obras que suman cerca de 60.000 euros, según los datos del perfil del contratante del Ayuntamiento. Esa cifra contrasta con los más de 18 millones en obras licitados por el gobierno local de Vigo en los 20 días siguientes a tener aprobados sus presupuestos para este ejercicio.

García se mostró «preocupado» por la «paralización», y aseguró no tener una explicación para lo que está ocurriendo. Señaló que el gobierno local aún está formando a parte del funcionariado en la nueva ley de contratación, pero los sindicatos no han recibido quejas al respecto.

Los árboles de Primo de Rivera no se talarán aunque el alcalde dijo que estaban enfermos

Radio Voz se hizo ayer eco de la decisión del gobierno local de indultar a los árboles de la avenida Primo de Rivera, que iban a ser talados para facilitar la construcción del nuevo carril bici metropolitano. El motivo del indulto, según explicó la Marea Atlántica en las redes sociales, fue que se escuchó a la ciudadanía, ya que la tala había sido muy criticada por varios colectivos, entre ellos la entidad ecologista Arco Iris.

Sin embargo, el gobierno local había defendido la retirada de los árboles por motivos técnicos. Tanto la concejala de Medio Ambiente, María García, como el alcalde, Xulio Ferreiro, habían subrayado la necesidad de la tala tanto para facilitar la obra como por el estado de salud de los árboles que flanquean la avenida.

El regidor, en una entrevista anterior en Radio Voz había señalado que era preferible cambiar esos árboles por otras especies «menos agresivas», ya que sus raíces podían suponer un riesgo para el pavimento del carril bici.

Pero además Ferreiro había subrayado que «prácticamente todas as árbores están enfermas». Según explicó estaban aquejadas por la aparición de un «fungo», cuyo desarrollo se habría visto facilitado por la variación de las temperaturas en invierno. La acción de ese hongo había provocado que la mayoría de los ejemplares estuviesen en «un estado moi deteriorado», lo que había llevado a los técnicos a aconsejar la tala. El gobierno local no ha explicado cómo se han solventado los motivos técnicos que le llevaron a optar por la tala, ni si el estado de salud de los árboles ha mejorado de forma súbita frente a la mencionada plaga de hongos.

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