La comarca se llevó la peor parte de la llegada de Félix

D. Vázquez A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Un pesquero tuvo que auxiliar a un deportista que practicaba windsurf en Oza y en A Coruña cayó una ventana de un décimo

11 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si la imagen más significativa de la jornada de ayer en la ciudad fueron los bañistas nadando en Riazor con playas cerradas ante la llegada de la borrasca Félix, en la comarca lo que predominó fueron las intervenciones por la caída de árboles. Los bomberos coruñeses tuvieron más de una veintena de salidas desde la una de la tarde a la medianoche, llegando a estrenar su nuevo camión con un brazo de 45 metros, entre los que destaca el traslado a la avenida de Oza, donde cayó una ventana desde un décimo piso, sin provocar daños, y el aviso de que había un deportista practicando windsurf en Oza que necesitaba ayuda, aunque finalmente fue auxiliado por un pesquero. La mayor parte de sus intervenciones fueron por caídas de antenas, de vallas, señales de tráfico, capuchones de chimeneas y uralitas.

Mientras, Protección Civil y los bomberos de Arteixo tuvieron salidas por la caída de dos árboles en Larín y Armentón. En Cambre, la Policía Local informaba de un suceso similar en As Travesas, y en Oleiros, hubo uno en Perillo. Los bomberos de Betanzos también tuvieron que desplazarse por árboles a Paderne, Piadela y Miño, además de por un poste de Bergondo, el concello en donde Protección Civil no paraba de sumar intervenciones: en Cortes, Moruxo, Gandarío y A Galea. Protección Civil de Miño también se desplazó por el desplome de otro árbol en San Xoán de Vilanova, mientras que en Culleredo hubo que retirar cascotes de una fachada. Por su parte, en Sada, que optó por restringir el acceso a la zona portuaria, no se celebró el feirón por precaución.