Pisos caros y sueldos bajos: cuando las cuentas no cuadran

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

La escasez del parque de vivienda pública no cubre la demanda de quienes no pueden pagar un alquiler

28 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A Coruña tiene un grave de problema de vivienda: no hay pisos nuevos, las ventas van despacio porque no hay financiación adecuada y la oferta de alquiler es cada vez más baja y cada vez más cara. La situación es grave porque en la ciudad, por un lado, existe un sector de la población que necesita acceder a una vivienda, y por otro existe un menú de pisos que no se ajustan en sus tarifas a la realidad económica y laboral de los demandantes. En esa situación, la política municipal y autonómica de vivienda es totalmente insuficiente, pues no hay alternativas reales para esas personas ni se las espera. Ese es el resumen de la situación hecho por la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias. Con esos datos en la ecuación las cuenta no dan en A Coruña.

Ingresos

El mileurismo. Según los últimos datos del IGE (2015) los ingresos medios en la ciudad son de 9,6 euros brutos por hora de trabajo. Con un contrato de 40 horas salen 1.536 euros brutos al mes. La cuantía apenas se ha movido con respecto al 2012, cuando se pagaban 9,4 euros brutos por hora. Esa es la media, pero la situación de los jóvenes es bastante peor. Según las mismas fuentes, las personas con edades comprendidas entre los 16 y los 35 años perciben en A Coruña 6,8 euros por hora, es decir, 1.088 euros brutos al mes con un contrato de 40 horas. A eso habría que restarle los impuestos y pagos a la Seguridad Social correspondiente.

  

Precios

7,60 el metro. Con los datos anteriores se hace evidente que los alquileres no son para todos. Un piso de 100 metros cuadrados en la ciudad cuesta, de media, 760 euros al mes. Eso supone cerca del 75 % de los ingresos medio de un joven coruñés. Encontrar una vivienda de menos de 400 euros al mes, por pequeña que sea, en buenas condiciones, es prácticamente misión imposible. El Banco de España aconseja que como límite se destine el 35 % de los ingresos al pago de la vivienda, tanto hipotecas como alquileres. En A Coruña, con ese criterio, muchos vecinos no podrían disponer de un techo.

Alternativas

Instituciones públicas. Las Administraciones, en teoría, tienen medios para corregir ese problema con propiedades públicas. Pero en A Coruña hace años que los bienes municipales y de la Xunta no crecen al rito de la demanda. El IGVS de la Xunta, tiene cerca de 200 pisos en la ciudad para alquileres sociales. La Xunta acaba de pedir licencia en el Ofimático para construir un bloque de 40 nuevas viviendas. El año pasado la misma solicitud fue rechazada por el Ayuntamiento porque el proyecto no cumplía. El plan lleva un año de retraso. El Ayuntamiento, por su parte, tiene 404 pisos. La mayor parte de ellos provienen de los años de los primeros gobiernos socialistas. En el pasado mandato se adjudicaron 67. En el actual se invirtieron 10.000 euros en arreglar cinco y está en proceso la compra de seis pisos más.