Su primera exposición individual fue en la Asociación de Artistas en el año 1969. Pasó casi medio siglo y se anuncia para hoy una muestra-homenaje a Antonia Villaverde Pumar, que, a sus 97 años, sigue pintando en su casa de la plaza de las Atochas. «Creemos que una vida artística vivida en su mayor parte en A Coruña merece que esta ciudad, por iniciativa de la Asociación de Artistas, promueva este homenaje a una persona que desde la humildad y el trabajo ha llevado a cabo una intensa y callada labor docente y cultural», destacan desde el colectivo. De hecho el reconocimiento incluye la inauguración de dos exposiciones. Una, la ya citada en el bajo de la calle Riego de Agua a las 20.00 horas, y otra, media hora antes, en la Casa Museo Casares Quiroga donde se mostrarán cuadros de formato más grande. Hoy al mediodía en el restaurante del Sporting Club Casino habrá un almuerzo en honor de esta mujer nacida en Carballo y que vive desde que era joven en A Coruña. Ayer por la tarde nos acercamos por su casa. Está nerviosa con este reconocimiento, pero es una maravilla estar con esta pintora de 97 años que hizo retratos, paisajes, marinas, flores, bodegones y un largo etcétera de temáticas y técnicas. Fue una monja del colegio al que acudía la que le dijo que debería dedicarse al arte cuando vio sus trabajos. Ya en la Escuela de Artes y Oficios tuvo como maestra a María Corredoira. Una vida entre lienzos y pinturas que merecen el homenaje organizado por la Asociación de Artistas donde tantas veces en las últimas décadas expuso esta entrañable mujer.