A Coruña es la segunda ciudad más cara de Galicia para circular

Xosé Gago / Miguel Ascón A CORUÑA, OURENSE / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

ANGEL MANSO

Solo los coches que no superan los ocho caballos fiscales pagan menos que en la mayoría de las grandes urbes gallegas

10 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de Vigo, los coruñeses son los ciudadanos de Galicia que más pagan a su Ayuntamiento por circular por las calles de la ciudad. Hay una excepción, los propietarios de automóviles que no superan los ocho caballos fiscales. Sin embargo, en los tramos más habituales, los que van de 8 a 15,99 caballos, las tarifas que afrontan los coruñeses solo están por detrás de las que se aplican en la ciudad olívica.

De hecho, los tramos del impuesto de vehículos de tracción mecánica (IVTM) son muy similares entre ambas urbes, tanto que coinciden casi exactamente en la tributación de los turismos de 16 a 19,99 caballos fiscales, y exactamente en el caso de los automóviles de mayor potencia, que deben pagar 224 euros por superar los 20 caballos fiscales.

Las diferencias son mayores en los coches con menos motor. Los conductores de Vigo pagan 5,6 euros más que los coruñeses por circular con un coche de más de 12 caballos. Aunque vuelven a ser similares, con ligera ventaja para los de A Coruña, en el caso de los turismos más pequeños.

Pero la comparación con Vigo es la única en la que los coruñeses salen ganando. Los vecinos de las otras cinco ciudades gallegas pagan menos en todos los tramos -con la excepción de los de menos de ocho caballos-, aunque las diferencias son notables.

La ciudad más económica en los tramos más habituales, de 8 a 15,99 caballos, es Pontevedra. Allí los conductores abonan 55,85 o 118,5 euros al año por circular. El ahorro con respecto a los coruñeses oscila entre 5 y 10 euros.

Sin embargo, en Pontevedra es menos económico utilizar un coche de menos de ocho caballos, una categoría en la que A Coruña solo queda superada por Ferrol.

El Ayuntamiento prevé ingresar 11,8 millones por el IVTM este año. Es la misma cifra que el año pasado y que en el 2016, cuando se aplicó una reforma del impuesto que subió para los coches de mayor potencia y se redujo en los de menos caballos.