El PSOE vota sí mientras sacude a la Marea

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

El pleno aprueba de forma inicial el presupuesto del 2018 pese a la crítica unánime de la oposición

30 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo a la Marea le gusta el presupuesto de la Marea. Pero aún así el pleno dio el visto bueno inicial a las cuentas gracias al apoyo solitario del PSOE, que criticó el texto y la gestión de Ferreiro tanto o más que el PP, pero votó a favor.

Los presupuestos ascienden a 246,8 millones de euros, 7,3 más que los de este año. Son históricos porque, por primera vez, se superan los 100 millones de euros de recaudación de impuestos directos. Las inversiones y transferencias de capital para nuevas obras y proyectos suman 29,2 millones, el 11,83 %, el segundo porcentaje más bajo de la década. La principal inversión, la reforma de la cubierta de Riazor, requerirá más de seis millones, la quinta parte del total. La partida que más se incrementa es la de gasto corriente. Mantener la Administración municipal costará en el 2018 casi 117,5 millones, 6,9 más que este año y 16,5 millones más que al inicio del mandato.

El alcalde, Xulio Ferreiro, calificó de «expansivas» las cuentas, que fueron tramitadas a toda velocidad con el fin de que fuesen aprobadas de forma inicial antes de que terminase el año. No entrarán en vigor hasta finales de enero o febrero, cuando finalice su tramitación ordinaria.

Las prisas del gobierno local dejaron a la oposición casi sin tiempo para revisar el texto. Lo hicieron entre el pasado viernes y el día 26, con la Navidad y sin un solo día hábil por el medio. Sus críticas fueron unánimes.

El PP votó en contra, anunció que presentará alegaciones y ayer planteó una enmienda a la totalidad. Fue rechazada por la Marea y el PSOE, pero el BNG se abstuvo. Los nacionalistas se abstuvieron, pero anunciaron alegaciones. Votaron distinto, pero el diagnóstico de Avia Veira y el de Rosa Gallego compartió similitudes: el presupuesto confirma que la Marea ha renunciado a puntos claves de su programa electoral, profundiza en la privatización de servicios e incrementa el presupuesto para fiestas mientras recorta la renta social municipal de 1,6 a 1 millón de euros.

El PSOE fue incluso más duro, pero votó a favor del presupuesto apelando a su responsabilidad con una ciudad «empantanada». Su portavoz, José Manuel García, hizo un balance pésimo de la gestión de la Marea, y subrayó que jamás harían esos presupuestos si estuviesen gobernando, pero anuncio su voto a favor para evitar que «ustedes [la Marea] se estrellen y se lleven la ciudad por delante».

«Ter orzamentos beneficiará á cidade»

La titular de Facenda, María Eugenia Vieito, defendió la importancia de contar con presupuestos desde finales de enero: «Beneficiará a toda a cidade». Vieito no entró en la refriega con el PSOE, pero sí respondió a los ataques de PP y BNG. A los primeros les recordó que Ourense, donde gobiernan, no tiene presupuesto nuevo desde hace años, y les acusó de huir de las negociaciones. Al Bloque le recordó datos del bipartito, y les reprochó no haber hecho propuestas para las cuentas. Defendió la inversión en gasto social del gobierno local, con la creación de nuevos centros para los sintecho, y la puesta en marcha de la renta social municipal.

«Las facilidades, para los okupas»

La portavoz del PP, Rosa Gallego, describió una ciudad «abandonada» por el recorte en inversiones: «No hay ni una escuela infantil ni un centro día nuevos, solo locales para que estén a gusto lo okupas». Gallego recordó que la obra de Riazor ya tendría que estar hecha, y que solo la han reactivado «tras poner en riesgo a las personas», destacó el aumento de fondos para externalizaciones y fiestas, recordó que A Coruña es la ciudad que «registró los peores datos del paro de Galicia en el 2017», y vaticinó que con este presupuesto, «que habría que romper y hacer de nuevo» van a seguir «el desempleo y el abandono de los barrios».

«Son os orzamentos das renuncias»

Avia Veira, portavoz del BNG, recalcó que la Marea renuncia a parte de su programa en este presupuesto. Tachó de «paradigmático» que se recorte la renta social municipal en vez de intentar mejorar la ordenanza que la regula. Recordó que el carril bus, aún pendiente, figuraba en el programa; también figuraban las municipalizaciones, pero las cuentas «aumentan as externalizacións». El «colmo das renuncias» es que se haya eliminado la partida para redactar un plan de inclusión social. Veira recordó que el gobierno ha dicho que lo haría una empresa, luego funcionarios, luego la UDC y ahora lo ha retirado. «Non sei que pensar», señaló.

«Ahora cumplan y déjense de excusas»

El socialista José Manuel García lamentó que el presupuesto vuelva a salir con retraso a pesar de su apoyo desde septiembre: «No son capaces ni con alfombra roja». García recomendó a la Marea que «ahora cumplan y déjense de excusas». También les aconsejó aprovechar los Dillo Ti hasta que la junta electoral los suspenda -como ya hizo- por ser «un acto partidista». Les reprochó haber dado el cuidado de los sintecho a una empresa privada que «obtiene beneficio». Es, dijo, «lo más zafio que hemos visto (...) pasará a la historia negra de la ciudad» y advirtió que su apoyo a las cuentas no se extenderá automáticamente al próximo año.