El PSOE se une a la Marea para impedir en el pleno la rebaja del IBI

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

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CESAR QUIAN

Los socialistas cambian su posición sobre el impuesto para favorecer un pacto con el grupo de gobierno

10 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La propuesta del Partido Popular para reducir un 10 % el IBI fue rechazada en el pleno de ayer. La clave estaba en el grupo municipal socialista, que en su día había defendido un planteamiento similar al de los populares. Lo reconoció su portavoz, José Manuel García, al empezar su intervención sobre el asunto: «Es cierto que el partido socialista defendió durante todos los años anteriores una rebaja del IBI, lo dijimos en este pleno, está en las actas de las sesiones y en las hemerotecas». Pero, argumentó que «hemos dado un nuevo concierto de entendimiento para que A Coruña mejore en el ámbito de la competitividad empresarial» y aludió a la «flexibilidad para alcanzar un acuerdo y el gobierno de Marea Atlántica también», invitando a los populares a sumarse alguna vez a un acuerdo. En este sentido anunció rebajas en el impuesto de actividades económicas, en la tasa de basuras, en las licencias de aperturas de nuevos locales comerciales, en las cuotas de las escuela municipal de música y «que los clubes deportivos de la ciudad por fin puedan cobrar entrada».

En el transcurso del pleno, este principio de acuerdo entre socialistas y la Marea sería refrendado por la concejala de Facenda, Eugenia Vieito, que les recordó a los populares que habían sido ellos los que subieron el IBI en los años 2012 y 2013. Frente al datos del PP de que el gobierno local dejó de gastar 109 millones de euros en los dos años de mandato, tanto Vieito como el Xiao Varela, aseguraron que en estos momentos tienen ejecutado más del 54 % del presupuesto.

Apuntaba Xiao Varela, concejal de Rexeneración Urbana, dicho dato en la novena modificación de crédito del presupuesto de este año que suma casi un millón de euros y está destinado a la compra, o la expropiación, de un edificio de la calle Pío XII, con el fin de hacer un acceso peatonal en la zona.

El PSOE se pronunció a favor de la compra, que el gobierno local está negociando con el arzobispado de Santiago, y la portavoz del BNG, Avia Veira, pidió que en la mejora del entorno del la plaza de San Agustín no se olvidase la reforma del interior del mercado, que está pendiente.

Entre los asuntos aprobados por unanimidad estuvieron el cambio de nombre del colegio Montel Touzet, que, una vez que la Xunta dé el visto bueno al acuerdo, también unánime, del consejo escolar, pasará a llamarse Cidade Vella, y la modificación de la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica.

Expedientes por ruidos

El principal cambio es esta normativa es que el plazo para resolver los expedientes abiertos a un local pasa de tres a seis meses. Y es que con ese plazo en ocasiones no era posible ejecutar las sanciones. A esto último aludieron los populares para apoyar el cambio, si bien Martín Fernández Prado aseguró: «Los ciudadanos no encuentran solución a los problemas de ruidos», y aludió a lo que ocurre en zonas de copas del Orzán, de Pescadería (plaza de la Cormelana) o el Agra. Según Xiao Varela, en la primera de las zonas ya han cerrado un local y otro está expedientado, y cifró en 144 los expedientes abiertos por cuestión de ruidos.

Policía de barrio

La moción del Partido Popular para la recuperación de la Policía de Barrio fue modificada por Marea Atlántica pidiendo al gobierno local que «manteña a súa aposta pola Policía de Barrio». Y es que según Rocío Fraga, «non é certa a retirada de axentes da rúa, non falta Policía Local nos barrios». También aludió a los refuerzos de agentes en lugares puntuales como el mercadillo de los Mallos y enfatizó que «isto non é o Bronx como pretenden vostedes», en alusión a la bancada popular.

Mientras la edila del BNG Avia Veira apuntaba que «facer o traballo social de prevención non é cuestión da Policía Local», desde el grupo socialista Yoya Neira aludía también a la prevención y criticaba a los populares que se atribuyeran la puesta en marcha de la Policía de Barrio cuando «siendo concejal José Nogueira ya existía».

Aunque fue aprobada por unanimidad de todos los grupos municipales la modificación de la ordenanza del Centro Municipal de Empresas de la Grela, un cambio que permitirá a las firmas un mayor tiempo de estancia en el mismo y una mayor consolidación, el punto dio lugar a otro enfrentamiento entre PP y Marea Atlántica por los datos del paro en A Coruña y la promoción de los emprendedores y los cursos de formación destinados a los mismos.

Cataluña crispó el pleno que acabó con avisos de expulsión

Cataluña crispa. Y mucho. En el pacífico pleno de ayer solo saltaron chispas por ese motivo. Primero fue una moción del Partido Popular de respaldo a los policía y guardias civiles que están en tierras catalanas. La lectura de la moción acabó con aplausos del público, un grupo de agentes. El alcalde les llamó la atención y entonces los aplausos sonaron en la bancada popular. Nuevo aviso. En las intervenciones, Avia Veira puso la grabación de las declaraciones que el portavoz del PP, Pablo Casado, había hecho por la mañana. Para la edila nacionalista eran amenazas veladas de muerte. Rocío Fraga presentó otra moción reprobando a la vicepresidenta. Rajoy y su papel el pasado día 1 entraron en el debate. El PSOE se sumó al reconocimiento que proponía el PP a las fuerzas de seguridad y pidió diálogo. La moción del PP salió adelante, la de la Marea fue rechazada, y desde el público volvieron los aplausos y el alcalde volvió a pedir calma. También lo hizo al final del pleno, después de que la portavoz del PP le recriminase «actuaciones contrarias a la ley», con su apoyo al proceso independentista de Cataluña.

Le costó terminar su intervención de respuesta a Xulio Ferreiro. El edil del PP Roberto Coira primero no se lo puso fácil, con varias interrupciones. Antes de comenzar la rifirrafe, el alcalde argumentó que la cuestión de Cataluña «me parece que e un asunto co que non se debería xogar, nin incorrer en imprecisións. Hai que ser precisos, honestos e responsables», afirmó. «Vostedes só queren crispar. Cataluña é unha escusa», dijo dirigiéndose a los populares y tras matizar que él no había defendido lo que ellos decían que defendía. «Eu estou moi preocupado por esa situación. Eu, se puidese escolle falaría da Coruña, pero non podo escoller porque vostedes non me deixan», dijo. Argumentó que había ido a la reunión de Zaragoza precisamente a pedir diálogo entre Rajoy y Puigdemont, «que abandonen as trincheiras», y aseguró que el primero de ellos «é un problema para a convivencia de España». Y sentenció: «Manteño que os problemas políticos requiren solucións políticas e por iso defendo o diálogo». Antes de acabar había indicado a Coira que si seguía con sus interrupciones lo iba a expulsar de un pleno que solo Cataluña crispó.