El Instituto Cornide rescata la figura poliédrica de Salvador de Madariaga

Rodri García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Una obra del historiador Emilio Grandío muestra «un novo perfil, máis divulgativo»

09 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En los años veinte del siglo pasado era considerado el español más europeo. Al estallar la Guerra Civil tuvo que huir de España y «sus enseres fueron rápidamente repartidos tras la entrada de las tropas de Franco en Madrid», escribe el historiador Emilio Grandío Seoane en el libro Relato Vital de Salvador de Madariaga. Compromiso por la Democracia (Instituto José Cornide de Estudios Coruñeses). A pesar de ello, el día 2 de julio de 1937, Madariaga le envía una carta a Franco en la que le pide textualmente que «liquide esta guerra cuanto antes. Se acerca una negociación». Es solo una de las iniciativas que Madariaga llevó a cabo para intentar frenar el conflicto bélico, una labor mediadora que marcó toda su vida y que con 80 años, «en una entrevista concedida en el parisino Palais d’Orsay en 1966, consideraba que esta capacidad de hacer de puente entre posiciones encontradas un característico rasgo gallego...», escribe Grandío en una publicación que, según su autor, trata de dar «un novo perfil, máis divulgativo». Y es que, apunta, han pasado casi 20 años desde «cando se fixeron as últimas biografías».

Ironía próxima a la retranca

Acerca de esa vena gallega, señala este historiador como en sus alocuciones y discursos hay muchas referencias a su tierra, «unha maneira de ser galego que non chega a retranca, pero é tremendamente irónico». Esta es una característica que se nota también en sus cartas, de las cuales el Instituto Cornide conserva la mayor parte de ellas. En esas misivas están los principales personajes de la época ya que, indica Grandío, «chega ata os 90 anos e cubre case todo o século XX, que é un século cargado de violencia».

También las imágenes de esta publicación, cuya portada es un retrato de Madariaga en Oxford en 1966, forman parte del legado del diplomático que en 1956 era homenajeado en París y durante tres días distintos unas 300 personas asistieron a los actos, entre ellos varios jefes y exjefes de Estado europeos, además de personajes como Camus, Bertrand Russel, André Malraux, Gregorio Marañón, Jacques Maritain o Paul Casals. En uno de los días de homenaje, la actriz coruñesa María Casares declamó la Elegía a la muerte de Lorca, que había escrito el propio Salvador de Madariaga.

Y es que, destaca Grandío, Salvador de Madariaga «é un personaxe con moitos perfís e canto máis traballas a súa figura máis interrogantes xera» y alude a sus facetas como literato, político o diplomático... Sobre la cuestión que figura como subtítulo de esta publicación, el compromiso con la democracia, destaca que es una de las facetas del diplomático: «A súa querenza, a súa vontade de loitar pola democracia parlamentaria no sentido máis liberal do término, apelando á razón». También recuerda que tuvo ocasión de regresar a España con el fin de poder recuperar parte de sus bienes, pero no lo hizo «polo seu antifranquismo, que non era desde unha perspectiva persoal, era no sentido de que se trataba dunha ditadura».

«Era un dos grandes conversadores do século XX e a hora de resolver conflitos busca unha reflexión co contrario non para defender unha postura pechada senón para facer unha reflexión conxunta e confluír nun punto que poda servir de construción. Aquí non todo era branco ou negro», concluye Emilio Grandío, que a finales del próximo mes de noviembre dirigirá un curso de la UIMP sobre Salvador de Madariaga.

Carlos Nárdiz ingresará con un discurso sobre el agua en la construcción de la ciudad

La incorporación de nuevos académicos era una de la cuestión que planteaba la nueva directiva del Instituto José Cornide, tras su renovación a finales del año pasado. Así, Tino Fraga, el director, apuntaba que la intención era contar con varios componentes más y uno de ellos será el ingeniero de Caminos Carlos Nárdiz Ortiz. Tomará posesión el próximo 18 de octubre, a las 20.00 horas, con un discurso que lleva por título El agua (de tierra y de mar) en la construcción de la ciudad de A Coruña. El acto tendrá lugar en el salón de sesiones del Ayuntamiento y la respuesta estará a cargo de José Ramón Soraluce Blond, numerario de una entidad fundada en 1964 y cuya presidencia ostenta el alcalde de la ciudad.

Además de Nárdiz, en estos momentos, los numerarios electos y que están pendientes de la lectura de su discurso de ingreso son Mariola Suárez, directora del Archivo Municipal; la historiadora Ana María Romero Masiá, el arquitecto Manuel Gallego Jorreto, el exdirector de los Museos Científicos coruñeses José Ramón Núñez Centella, y el exalcalde Francisco Vázquez Vázquez. El número máximo es de 25 numerarios, si bien la entidad cuenta también con colaboradores expertos en distintas especialidades.

Además, el Instituto Cornide custodia importantes legados como son el de Salvador de Madariaga, «o coruñés e posiblemente o español con más proxección internacional no século pasado», apuntaba Tino Fraga, y el del naturalista ferrolano Víctor López Seoane, «o máis importante de Galicia». La institución también tiene previsto recuperar la revista que publicó durante un tiempo, pero que dejó de publicarse por problemas económicos.