Pablo Seijas: «Cada disco que saco me hace aprender»

La Voz

A CORUÑA CIUDAD

Elba Fernández

El músico coruñés ofrece su último concierto en la ciudad antes de irse a Madrid, dentro del ciclo del blog «Retroalimentación»

05 oct 2017 . Actualizado a las 11:30 h.

Regresa una temporada más el ciclo de conciertos de Retroalimentación, y lo hace con una despedida, la del músico coruñés Pablo Seijas, que abandona la ciudad hasta nuevo aviso. La cita es esta noche a las 21.30 horas en el BâBâ Bar, con entradas a 5 euros.

-Este va a ser tu último concierto en A Coruña hasta dentro de mucho. ¿Por qué?

-En noviembre me mudaré a Madrid. Tengo allí a mi hermano Adrián, que es mi otra mitad en esto de la música y la vida en general, también a algunos de mis músicos y a muy buenos amigos. En este momento de mi vida es un paso natural, y tengo muchas ganas de hacerlo. En Madrid compuse mi último disco, y es una ciudad que me ha aportado mucho.

-El concierto será en acústico, pese a grabarse «Debajo en el aire» con banda.

-Fue un disco compuesto de una forma muy sencilla, a guitarra y voz. Escapé a propósito de maquetarlo previamente y de producirlo en exceso, para que fuese un disco digno de escuchar ya fuese tocado con una banda o yo solo. Esa fue la idea que tuvimos desde el principio, queríamos algo que sonase verdadero. Las canciones ganan en libertad e improvisación, siempre dejo margen para que cambien cada noche que las canto.

-El disco tiene un punto de obra perfecta. Parece que se hubiera pulido todo al máximo antes de entrar a a grabar.

-Con Misterioso Viaje Holanda y en solitario los discos siempre los cociné más en el estudio. Había mucha maquetación previa, pruebas y más pruebas, eran trabajos más clínicos. En este simplemente llegué con unas 15 canciones, me rodeé de músicos que admiraba y les dije que hiciesen un poco lo que les pedía el cuerpo en cada uno de los diez temas que finalmente escogimos. Mucho ensayo en el local y menos trabajo en el estudio. Las canciones se grabaron en su mayoría tocando todos a la vez, buscando la toma buena, y sin metrónomo.

-No ha tenido mucha repercusión, pese a su calidad. ¿Te frustra que se trate de un disco semioculto?

-Este disco fue una apuesta personal, lo pagué con mis ahorros y me gusta que haya sido así. Creo que ese espíritu de honestidad se respira en las canciones. La repercusión ya es otro cantar, dado que lo he sacado sin discográfica ni nadie trabajando en su promoción más que yo mismo. Así, llegar a un público masivo es complejo. Yo escribo música para que la escuche cuanta más gente mejor, aunque soy consciente también de que el hueco comercial que pueda tener ya no depende solo de mi. Tiene algo de frustrante todo esto, pero siempre pienso que cada disco que saco es un paso más del que aprendo mucho.

-¿Volverá Misterioso Viaje Holanda?

-Los miembros del grupo nos hemos ido dedicando a otros proyectos, y la cosa se fue enfriando. Sacamos dos discos, estábamos trabajando en el tercero, y siempre tuvimos unas expectativas de renovación muy altas. Quizá eso también nos hizo dejarlo. Yo en aquel momento no me sentía muy capaz de hacer un buen disco para el grupo. Me apetecía más coger la guitarra y cantar, sin más. Este 2017 es nuestro décimo aniversario... A mí me gustaría volvernos a juntar en algún momento y grabar un nuevo disco. ¿Quién sabe?