Los okupas de la Comandancia de A Coruña ponen tarima y practican boxeo y capoeira

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Cedida

Los edificios cedidos por Defensa al Ayuntamiento están okupados desde noviembre

24 ago 2017 . Actualizado a las 12:48 h.

En la antigua Comandancia de Obras, un edificio cedido por el Ministerio de Defensa al Ayuntamiento, se practican boxeo y capoeira, baile swing, danza contemporánea, teatro... y hasta hay un «espacio no mixto de autoexploración femenina», conocido como La Tienda Roja, que tendrá lugar mañana y el domingo.

Esas son las actividades que organizan los okupas de las instalaciones militares, que entraron de forma irregular en noviembre y han bautizado los edificios como «Centro Social Okupado Autoxestionado (CSOA) A Insumisa».

En las imágenes publicadas por esa entidad se advierte que partes de la antigua comandancia han sido reformadas. La capoeira -arte marcial brasileño que se ejercita al son de la música como una especie de danza- se practica en una de las naves que luce suelo nuevo de tarima, las paredes están pintadas y también las puertas. Desde noviembre también se ha construido un skatepark -una pista de patinaje-, una sala de corpo-ximnasio de 350 metros con aparatos deportivos y «moita altura para facer tamén exercicios acrobáticos», una sala de conciertos y artes escénicas, una sala de exposiciones, un taller de bicicletas -aún en obras-, una zona de ocio llamada «Praza de Mari Carmen», y se están empezando a cuidar los jardines exteriores.

Todo indica que esas reformas se han llevado a cabo sin permiso del Ayuntamiento, que es el responsable de la custodia y mantenimiento de las instalaciones. Lo mismo pasa con las actividades citadas, que incluyen conciertos, degustaciones culinarias y otras, que en principio tampoco contarían con ninguna clase de licencia, ya que el gobierno local no ha hecho público ningún documento que avale la presencia de los okupas en los citados edificios públicos. Durante estos meses tampoco ha aclarado cómo se suministra el CSOA. Según los vecinos, hay un enganche irregular a la red eléctrica.

Defensa cedió el edificio al Ayuntamiento de A Coruña con el fin de que tuviese un uso público y se construyese allí el Centro de Producción de Diseño (Cidea), en el que el Ministerio de Fomento pensaba invertir más de 1,3 millones de euros. Ese proyecto está parado desde hace años.

A pesar de ser responsable de su custodia, durante los últimos diez meses el gobierno local no ha tomado ninguna medida para recuperar las instalaciones, incluso aunque los okupas no permiten la entrada de técnicos municipales desde que el Ayuntamiento finalizó su única intervención en las instalaciones: una obra menor para eliminar elementos de los edificios que podrían caer y suponían una amenaza para la integridad física de los ocupantes irregulares.

El gobierno local también ha hecho oídos sordos a las dos mociones aprobadas por el pleno instándole a desalojar el edificio. La última de ellas fue presentada por el PP y contó con el respaldo del PSOE. El BNG acusó a los populares de primar «o dereito á propiedade privada sobre o dereito á vivenda», siguiendo el argumento de la Marea. Salió adelante, como otra anterior, pero el ejecutivo local no ha hecho nada para llevarla a la práctica.

Una okupación «consentida» por un consistorio que quiere edificios sin irregulares dentro

En junio, un juzgado de A Coruña archivó la denuncia de Defensa contra la okupación de la Comandancia. El juez concluía que «no existe voluntad -ya expresa, ya tácita- por parte de la Administración local, que es la que tiene la responsabilidad de su conservación y custodia, contraria a tolerar la ocupación, por lo que no cabe apreciar el delito de usurpación».

El escrito decía que el Ayuntamiento es responsable de la custodia de la instalación, y que llegó a hacer obras para asegurar elementos de los edificios y proteger la integridad de los okupas. Pero más allá de esa actuación, «no consta que por parte del Ayuntamiento, ni de Defensa, se realizara a los ocupantes un requerimiento expreso de que abandonaran el lugar porque lo estaban ocupando ilegalmente».

El gobierno local no solo consintió la okupación, algunos de sus miembros la celebraron. Es el caso de la actual concejala de Seguridade Cidadá, Rocío Fraga que, citando al centro social okupado, escribió en Twitter: «Cando o sistema nos obriga, a okupación é un dereito. Xurde un novo proxecto social na Coruña, 10, 100, 1.000 centros sociais».

Pero en las bases publicadas por el Ayuntamiento para adquirir edificios privados y destinarlos a alquileres sociales se especifica que no podrán tener ocupantes de ninguna clase, ni arrendatarios ni en precario. Lo que obligaría a los propietarios a desalojarlos antes de vender, justo lo que el gobierno local ha rechazado hacer en la Comandancia de Obras.