Socorristas de San Amaro, hartos de advertir del peligro de las zambullidas

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

MARCOS MÍGUEZ

A pesar de los continuos avisos, jóvenes bañistas se tiran al agua desde zonas altas

19 ago 2017 . Actualizado a las 00:22 h.

Cinco de la tarde de ayer. La playa de San Amaro estaba casi llena y seguían llegando grupos de bañistas. Por la megafonía anunciaban el inicio inmediato de unos talleres para los más pequeños. A los pocos minutos, también a través de los altavoces, recordaban: «Está prohibido mergullarse desde as rochas». Es una advertencia que suena un buen número de veces cada día en este arenal, sobre todo en los días de mayor afluencia de bañistas. Pero ayer, media docena de adolescentes hacían caso omiso y saltaban, una y otra vez, desde el pequeño muelle que está pegado al Club del Mar. A los pocos minutos un adulto se sumaba al grupo y en lugar de advertirles del peligro de las zambullidas incluso los animaba a saltar al flotador que iban lanzando al agua antes de cada inmersión.

A las habituales advertencias de los socorristas a través de la megafonía se suma el cartel que está ubicado en la estructura del que en su día fue un muelle de carga para la piedra que se extraía de la cantera que había en la zona: «Se prohíbe zambullirse y tirarse al mar en toda la zona». El aviso, que está escrito también en inglés, lo suscribe el Ayuntamiento de A Coruña y Protección Civil. A pesar de todo ello, los socorristas reconocen que están un poco hartos de advertir a los usuarios del arenal del peligro de las zambullidas y consideran grave que no solo los más jóvenes no las tengan en cuenta, sino que, en ocasiones, sean sus padres quienes tampoco hagan algo para que no se pongan en peligro de sufrir una lesión medular.

Fuentes del servicio de socorrismo indicaban que la playa de San Amaro es la única de la ciudad en la que se da este problema. De todos modos, advierten que es necesario extremar la precaución puesto que incluso en la playa de Riazor, hace poco más de un lustro, se dio el caso de un joven que acabó con una lesión medular después de lanzarse de cabeza contra una ola.

La situación de la playa de San Amaro ha saltado a la actualidad después de que varias personas denunciaran el peligro que suponen las zambullidas que un grupo de jóvenes han estado haciendo en las inmediaciones del dique de abrigo, lanzándose los primeros días de esta semana desde las instalaciones que la Universidad tiene en la zona y ayer desde uno de los muelles.

«Hay que avisar a la policía porque eso es un peligro», indicaba la usuaria de una cafetería del entorno que presenció como saltaban los jóvenes e incluso intentaba, a gritos, disuadir a uno de ellos.