La mirada rebelde de un hombre de izquierdas

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

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CEDIDA

29 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

De José Luis Cadórniga Álvarez-Yáñez (Navia de Suarna, Lugo, 1954-A Coruña, 2017) recordarán sus amigos la integridad y la militancia incansable -fue miembro del Partido Comunista, Comisiones Obreras y Esquerda Unida- desde antes incluso de su llegada a A Coruña, cuando era ordenanza en Logroño de un inspector de Hacienda llamado José María Aznar, relación que «salvou aos camaradas comunistas dalgunha malleira de fascistas», recordaron a su muerte sus compañeros Xabier Ron e Irene Tomé.

Cadórniga sufrió desde muy joven una dolencia degenerativa que se agravó en los últimos meses a causa de un cáncer. Positivo, «de carácter arisco ás veces e debaixo unha bondade e xenerosidade enormes, a pesar da súa enfermidade nunca deixou de se ofrecer para canto acto reivindicativo había», subrayan Ron y Tomé, en una semblanza que se remonta a 1977 cuando Cadórniga «ía de piquete ás folgas, en muletas, en cadeira de rodas, tanto tiña». Cadórniga era «a permanente voz bronca» que gritaba consignas desde el coche que encabezaba las manifestaciones, el hombre atento que vigilaba que se garantizasen los derechos de las personas con diversidad funcional, el aficionado a la fotografía que retrató «a alma da rebeldía», revelan sus compañeros. «O edificio sindical da Xunta queda máis orfo e pode que no seu despacho, hoxe, estea tremendo de frío o retrato da Pasionaria».