El gobierno invirtió hasta junio 1,4 millones de los 37 previstos este año

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

La tardía aprobación de los presupuestos ralentiza otra vez la ejecución de obras

23 jun 2017 . Actualizado a las 11:59 h.

Según los presupuestos del 2017, las inversiones que realizará el gobierno local ascienden a 37.676.371 euros. Hasta el pasado 19 de junio, es decir, transcurrido más de medio año, la Marea solo había ejecutado de esa cantidad el 3,7 %, menos de 1,5 millones de euros. Si el porcentaje es bajo en ese campo, todavía lo es más en el capítulo de transferencias de capital. De ahí salen los fondos, por ejemplo, de las ayudas para rehabilitación, ascensores, y pagos de actuaciones como las de la Marina. Hay presupuestados cerca de nueve millones de euros, de los que en seis meses se han gastado solo 1.212.

Los datos figuran en el informe municipal de ejecución presupuestaria que, un año más, resulta especialmente bajo. En el 2017, como en el ejercicio anterior, una de las causas es la tardía aprobación de las cuentas, que no salieron con el visto bueno del pleno hasta finales de mayo. Con todo, hasta ese momento A Coruña funcionó con los presupuestos prorrogados del año anterior, por lo que se computan también los gastos vinculados a esos números. El informe calcula todo lo gastado entre el 1 de enero y el 19 de junio, no desde la aprobación del presupuesto.

En total, el Ayuntamiento lleva gastado en el 50 % del ejercicio el 22,7 % del presupuesto. La mayor parte del dinero se ha ido, hasta ahora, en nóminas y gasto corriente. Este último concepto engloba los suministros como agua, luz, combustible y otros. Restando esos dos capítulos, en medio año el gasto total en todo lo demás no llega a los nueve millones de euros de un presupuesto de 259 millones.

El ejercicio pasado se produjo una situación similar que generó un abultado remanente de ante la incapacidad de ejecutar el presupuesto. Entonces se insistió en que las cuentas del 2017 saldrían adelante en enero de un modo u otro. Sin embargo, hubo que esperar de nuevo hasta mediados de año, debido a la minoría del gobierno local (10 de los 27 concejales) y a la falta de entendimiento con la oposición.

El capítulo de transferencias corrientes, el que se dedica a pagar a asociaciones, becas y entidades, también está muy lejos de estar ejecutado. Van cinco millones de euros de los 30 que recoge el presupuesto, por lo que muchos de los fondos todavía no han llegado a sus destinatarios.

Con el verano encima y teniendo en cuenta que agosto es un mes en el que la Administración casi se para, queda muy poco margen en la segunda mitad del año para invertir 200 millones de euros. Diciembre tampoco es un mes de gran actividad. Así, se prevé que el año acabe con cifras de ejecución muy bajas, si bien el gobierno local asegura que los datos son mejores que con anteriores gobiernos locales.

María Pita amortizará el crédito de 7,6 millones vinculado a un plan de ajuste

La escasez de inversiones durante el pasado 2016 -por la aprobación tardía de las cuentas, que impidió ejecutar las previsiones de gasto- generó un importante superávit en la caja municipal. La no realización de obras y otras inversiones permitió un importante ahorro. Ese superávit, según el informe de la concejalía de Facenda, supone una capacidad de financiación para el Ayuntamiento de 26.223.076 euros, de los que 20.175.649 euros son remanente líquido para gastos generales.

Parte de ese dinero se destinará -falta que haya un acuerdo plenario para ello- a amortizar los 7,6 millones de euros de deuda suscritos por el anterior gobierno local en el año 2012 y vinculados en su día a la firma de un plan de ajuste. De ese crédito quedan 5 millones por amortizar y Facenda pretende hacerlo ahora, eliminando también los condicionantes de ese plan de ajuste. Desde la concejalía recuerdan que por aquel plan el PP comenzó a cobrar una tasa por las bodas en María Pita, algo que la Marea anuló el pasado año. Dicen también que por la misma causa hubo recortes en fondos para limpieza y gestión de residuos.

La austeridad en las inversiones mostrada durante el anterior ejercicio logró ese ahorro municipal con el que ahora se amortiza la deuda. «Estamos a dar sobrado exemplo de que este goberno local sabe xestionar e sabe facelo ben», dijo le edila Eugenia Vieito, que avanzó que sin el plan de ajuste se evitarán «todos os recortes á cidadanía ligados ao mesmo». Se amortiza, eso sí, gracias a los recortes realizados el año pasado.