Fábrica de armas: «La están dejando morir», alertan los trabajadores

Rodri García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Paco Rodríguez

Silencio del Ministerio de Defensa, la Xunta «tiene intención de hacer algo» y la concesionaria espera tener un nuevo inversor

22 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Trece coches y una moto. En ellos iban 16 personas. Salían ayer de la fábrica de armas, entre las tres y las tres y cuarto de la tarde. Un vehículo más estaba estacionando dentro, frente a las oficinas, y otro en la entrada. Era todo el movimiento que había en unas instalaciones que, en teoría, deberían estar a pleno rendimiento, con 155 empleados. Así se había concretado hace más de dos años cuando el Ministerio de Defensa adjudicó 127.943 metros cuadrados de su parcela (la superficie total es de 263.274 metros cuadrados), a la empresa Hércules de Armamento. Sin embargo, la situación es otra: menos empleados, -«pasamos dos cen traballadores», dice Xabier Rioboo, portavoz del comité de empresa-, la producción es solo civil, no fabrican armas, y el retraso en el pago de las nóminas es de varios meses. A la fábrica de armas «la están dejando morir», resumían varios empleados.

¿Cómo está la plantilla?

«Estamos aquí para recordarlle ao conselleiro de Industria que levamos desde finais do ano 2015 pedíndolle reunións; tamén as pedimos posteriormente en xullo e setembro do 2016, aparte de iniciativas que se aprobaron por unanimidade tanto no Parlamento galego como no Concello da Coruña». Esto decía el portavoz de los trabajadores el pasado 9 de febrero durante una concentración en Monelos. Con dicha reunión querían «analizar a situación na que estamos e elaborar e poñer en marcha un plan industrial que garanta os postos de traballo e a actividade industrial na fábrica de armas». Aunque no con el conselleiro, la reunión con Industria tuvo lugar el pasado viernes y después de ella los trabajadores acordaron en asamblea «aprazar 15 días o calendario de mobilizacións previsto».

¿Está funcionando?

Desde hace meses, en la producción de la fábrica «non estamos ao cen por cen, pero temos algunha actividade para o sector civil» con piezas «de automoción, próteses e o sector da aeronáutica», detallaba Rioboo. De todos modos, sostiene, «sabemos que hai perspectivas, hai preacordos con determinadas firmas e hai negociacións para aumentar a carga de traballo e está pendente algunha delas da entrada dalgún socio inversor que pode ser Escribano ou poden ser outros porque sabemos que hai negociacións con outros posibles inversores».

¿Por qué no hace armas?

El Ministerio de Defensa le retiró a Hércules de Armamento la licencia para fabricar armas debido a los problemas de seguridad. La empresa Segur Ibérica que se encargaba de la vigilancia abandonó la misma el 25 de noviembre del 2015 por impago por parte de la concesionaria. Ahora las labores de vigilancia las llevan a cabo trabajadores de Hércules de Armamento. Mientras no se restablezca la vigilancia como fija Defensa no podrá fabricar armamento.

¿Qué va hacer la Consellería de Industria?

La reunión de los representantes de la Consellería de Industria y de los trabajadores analizó «a posibilidade de crear unha mesa de traballo na cal participaran as distintas Administracións implicadas na posible solución», aseguran desde el comité de empresa en un comunicado. Una cuestión que dicho comité matiza es que «en ningún momento esixiu axudas á Xunta para a entrada de inversores». Lo que piden, detallan, es que «falaramos dunhas subvencións que hai establecidas legalmente e para empresas con problemas. En todo caso son subvencións que podían recibir os inversores en base a unha inversión que tiñan previsto realizar na fábrica». En esta línea aseguran que Mecanizados Escribano, una empresa del sector radicada en Madrid, mantuvo contactos con la Consellería de Industria, «e presentaron un plan industrial que contemplaba inversións a realizar na fábrica. Os contactos con Escribano seguen e sabemos que tamén os hai con outros inversores. É algo que está levando o adxudicatario».

¿Cuál es la postura del Ministerio de Defensa?

«Defensa non dice nada, de momento», indican desde el comité. Y detallan que hubo una reunión de la comisión de seguimiento de la concesión «que no prego di que ten que ser cada ano, pero estase facendo cada seis meses. Foi en novembro e a próxima será en abril, máis ou menos. E non houbo máis pronunciamento por parte de Defensa». La única vez que el ministerio se pronunció fue en noviembre del 2014, poco después de la adjudicación de la fábrica de armas a Hércules de Armamento para asegurar que se había hecho con todo rigor.

¿Qué pasa con los extrabajadores?

Los 61 extrabajadores que no se acogieron a las bajas ofrecidas por la multinacional General Dynamics y se movilizaron para evitar el cierre de la fábrica van camino de los cuatro años de protestas. Este colectivo denunció en reiteradas ocasiones irregularidades en la adjudicación de la fábrica y que la concesionaria no reunía las condiciones para sacar adelante el proyecto industrial. Curiosamente, también ellos han pedido a la Consellería de Industria que se implique para intentar salvar la fábrica de armas y que la misma siga con su actividad industrial.