Lo que el viento se llevó

Alfonso Andrade Lago
Alfonso Andrade A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Paco Rodríguez

Los veleros de la Tall Ships desfilaron junto a la Torre antes de abandonar la ciudad

15 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Velas desplegadas para cazar el viento al asomar la proa por la torre de Hércules, un saludo a la nutrida concurrencia que conquistó césped y rocas de punta Herminia para captar las mejores imágenes y... rumbo a alta mar. La brisa hizo su trabajo y la silueta de los treinta veleros de la Tall Ships Races que desfilaron a mediodía frente al faro pasó a ser historia de la ciudad.

Madrugaron muchos coruñeses para ver la salida de la regata de grandes veleros y, sin embargo, tuvieron que esperar. La niebla, bastante espesa hasta mediodía, obligó a retrasar las maniobras. Por suerte, la bruma levantó lo suficiente para no entorpecer en exceso el espectáculo, que se siguió con especial interés desde la zona del Náutico, en la Dársena, y desde el paseo marítimo, frente a la Solana.

Allí se arracimaron numerosos espectadores, que fueron viendo pasar los navíos que, durante cuatro maravillosas jornadas de sol y paseos, pudieron visitar en los muelles. Junto al Náutico se acomodó bien temprano María Andrade, que quería una posición de privilegio para su Nikon de última generación. «Estoy aquí desde las nueve y media porque soy de Ferrol y quería coger una buena posición para no perderme ni un detalle», explica. A las once estaba ya «algo cansada», pero insistía en que «mereció la pena» y que ahora tiene unas imágenes «maravillosas, de exposición».

Malena López, que cuenta solo 7 añitos recién cumplidos, acudió con sus padres para ver zarpar al Simón Bolívar. No quería perdérselo porque es su favorito. «Fue el que más me gustó cuando subí a los veleros en el puerto», aclara. Sus padres cuentan que ya habían llevado a Malena a los barcos en la edición anterior, pero era «muy pequeña y ni siquiera guarda recuerdos».

Los que no encontraron plaza en primera fila tampoco tuvieron problemas para ver la salida. Un grupo de coruñeses improvisó un mirador encima de lo que dentro de unos meses será el restaurante Silabario, en el Parrote, y que ayer fue inaugurado, digamos que con otro uso.

Los tripulantes del «Simón Bolívar» embarcaron cajas de pañales

La fotografía que ha publicado un digital venezolano en la que se puede ver a uno de los tripulantes del buque escuela Simón Bolívar, de ese país, metiendo una enorme caja de pañales en el velero ha encendido las redes sociales, donde los internautas comentan las enormes dificultades por las que tiene que pasa un pueblo privado de las necesidades más elementales.

Además, los tripulantes de este buque tuvieron la suerte de cara durante su estancia en A Coruña, pues se llevan también dos jamones que ganaron en la divertida prueba de la cucaña.