Miguel Díaz: «La afición es inquebrantable»

Pablo Gómez Cundíns
pablo gómez A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

El niño que iba con su padre a los ralis de A Coruña y al autocrós de Arteixo salva del olvido esta porción de historia

02 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Miguel Díaz (A Coruña, 1978) es uno de los nombres propios del automovilismo en Galicia. Ha convertido su pasión en profesión y desde que en el 2000 empezó a colaborar en publicaciones de motor, y en 2001 creó una web dedicada a las carreras en Galicia (Motorweb), no ha parado de informar desde la revista Crono Motor, ahora como jefe de redacción. Antes, fue copiloto entre 2002 y 2006. Acaba de publicar el libro De carreras por La Coruña.

-¿Cómo surge el proyecto?

-Muchos coruñeses no cumplimos el sueño de salir de María Pita en un coche de ralis, porque dejó de hacerse el rali que habíamos crecido viendo. Había magníficos libros sobre otros ralis españoles, pero no del nuestro, y me propuse intentar solucionarlo. Es doloroso ver cómo muchas escuderías apenas conservan memoria de lo que han hecho. Este libro ayuda a que muchas historias ya no se pierdan.

-¿Qué fue lo más bonito del libro?

-¡Terminar! Estuve doce años recopilando datos, escribiendo, maquetando... Fue como cuando Tim Robbins hizo el túnel para escapar de la cárcel en Cadena Perpetua, usando un martillo de juguete.

-¿Las motos abrieron el camino?

-Sí, pero tanto en las carreras como en las carreteras. La motorización de los españoles, para muchos, empezó sobre dos ruedas.

-¿Qué estado de salud le otorga a las carreras?

-En nuestra ciudad vuelve a haber carreras, y eso es mucho. A ver si las conservamos. En Galicia, estoy convencido de que es el segundo deporte en seguimiento, pero tenemos la gestión federativa que tenemos, y entonces en TVG televisan traineras o cosas así, con todos mis respetos para los remeros.

Pasa en muchos deportes. Si la innovación la tienen que aportar personas de sesenta años que llevan treinta aferrados a un cargo, no puedes ser optimista. Pero la afición de los deportistas es inquebrantable y aguanta con todo. Seguirá aguantando.

-¿Se ha superado el accidente de Carral?

-Según la versión oficial se ha mejorado muchísimo. A mí me parece que seguimos haciendo las cosas prácticamente igual, que no se han dado algunos pasos necesarios, y que se proponen ideas estrambóticas. Es mi opinión, y puede ser incómoda o incluso estar equivocada. Con todo, tengo esperanza de que no se repita algo tan terrible como aquello.

-¿Qué futuro ve en las carreras?

-En Galicia hay miles de adictos a la gasolina. El futuro pasa por algo tan sencillo como que el gobierno local y las empresas coruñesas se den cuenta de qué son en realidad las carreras: Una manera tremendamente efectiva de potenciar la hostelería local en temporadas bajas, atrayendo a la gente con dinero que compite, así como a un montón de aficionados que también dejan dinero en la zona. Que conste que, para ello, es necesario que los organizadores tengan amplitud de miras para plantear algo atractivo.

Un «libro de libros», proyecto ambicioso y colosal recopilación de datos históricos

Carreras e historias coruñesas articulan un libro de libros, un planteamiento ambicioso, colosal recopilación de datos prácticamente desconocidos. «De determinadas épocas había muy poca información, sobre todo de antes de los 80, cuando no existía Crono Motor», explica el autor. «Espero que alguien lo lea entero, pero si no es así, al menos que vea las fotos, que hay más de mil», recalca Chapi, que descarta elaborar una segunda parte: «La historia de las carreras coruñesas sigue adelante y debe seguir registrándose. Pero, hoy por hoy, yo no haré esa segunda parte. Que venga otro y lo mejore».