A los 15 días de recibir el premio Bitácoras por su blog, la editorial Planeta le propuso escribir un libro. Ahora es divulgadora
15 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Cuando Deborah García (A Coruña, 1984) camina por la playa del Orzán no dice «aquí huele a mar», sino «aquí huele a dimetilsulfuro». Ese es el nombre que escogió para su blog de química, ahora transformado en el libro Todo es cuestión de química... y otras maravillas de la tabla periódica.
-Si entre usted y yo no hay química... ¿Cree que esta entrevista saldrá bien?
-Si no hay química de por medio, no puede salir bien. En sentido literal y figurado.
-Probemos pues. Hoy en día Internet es la enciclopedia Larousse de nuestra época. ¿Detecta usted, como profesora de Química, mucha falta de rigor en la red?
-Sí. Creé el blog para tratar de aclarar las dudas de mis alumnos. Luego empezó a interesar a mucha más gente y hasta hoy.
-¿Hay algo en la vida que no sea cuestión de química?
-La química está en todo. En la pasta de dientes, en la crema hidratante, en el protector solar y en la cocina. En el libro hay un capítulo entero dedicado los procesos que ocurren cuando fríes, cuando hierves...
-¿Y qué explica, por ejemplo?
-Cómo hacer un cocido. Hasta el cocido gallego es cuestión de química. El orden en el que introduces los ingredientes y la temperatura que usas para cada uno de ellos, todo está basado en los fundamentos de la química.
-Cuando meto un pastel en el horno, estoy haciendo química.
-Sí. Tu cocina es como un laboratorio. Cuando fríes un filete, y pasa de rojo a marrón, ha experimentado un cambio químico.
-¿Y la química personal? Porque esa también está en todo.
-Claro, el título del libro ya juega un poco con eso.
-Pero el amor es otra cosa.
-Una cosa son las reacciones químicas que tu cuerpo experimenta cuando te enamoras. Que se te dispare la serotonina o la oxitocina son cosas medibles, pero por qué te enamoras de una persona o de otra es algo que ni la química ni ninguna ciencia va a poder resolver ni lo pretende.
-Oiga, ¿por qué se le dio a usted por estudiar Química?
-Porque tenía un profesor en el instituto que me hizo que me enamorase de la química.
-¿Y él lo sabe?
-Sí, de hecho, ahora es mi amigo. Se llama Joselu Sanz y sigue de profesor en las Calasancias. En sus clases transmitía pasión y yo siempre quise, algún día, llegar a emocionar como me emocionaba él.
-Pues usted ha pasado de profesora a divulgadora. Debe haberlo conseguido.
-Sí, es otra forma de enseñar ciencia y, además, de manera libre, porque puedes contar las cosas a tu manera. Es lo mismo que me dijo la editorial cuando me propuso hacer el libro.
-¿Qué le dijeron?
-Me pidieron que contase lo que yo creía que todo el mundo debería saber de química y a mi manera. Me dijeron que les gustaba la forma en que yo tenía de explicar las cosas en el blog y me puse manos a la obra.
-Así que usted hizo el camino al revés. Pasó de lo digital a lo analógico.
-Sí. Fue la editorial la que contactó conmigo para proponerme que lo escribiera.
-¿Cuándo fue eso?
-Me llamaron de Planeta quince días después de que me dieran el premio Bitácora por el blog. Es uno de los galardones más prestigiosos para los blogguers.
-¿Cúanto tiempo le dieron para escribirlo?
-Poco. Unos cinco meses.
-¿Qué tal van las ventas?
-Muy bien. Mi editora está contenta. ¡Este mes ya cruza el charco! Saldrá publicado en México.
«Aunque la sé de memoria, llevo una chuleta de la tabla periódica metida en la cartera»
Si quieren escuchar en directo a esta divulgadora científica coruñesa pásense por la Domus el próximo miércoles, 18 de mayo, a las siete y media de la tarde. Allí estará Deborah García para participar en la charla Hablemos de ciencia y arte, que organizan los Museos Científicos Coruñeses.
-¿Se puede vivir de la divulgación científica?
-¡Espero que sí! Estoy intentando vivir exclusivamente de ello. En la actualidad, tengo mucha actividad de conferencias y charlas.
-¿Qué mira primero en la etiqueta de un producto: el precio o los componentes?
-Los componentes, claro. Cuando voy al supermercado, siempre me fijo en los ingredientes de los productos y en si se entiende bien la tabla nutricional.
-Hablando de tablas, la periódica se la sabrá de memoria, ¿no?
-¡Claro! Aunque me la sé de memoria, siempre llevo una chuleta de la tabla periódica metida en la cartera.
-Pues ahora toca que me diga por qué bautizó su blog de química como Dimetilsulfuro.
-Porque es el principal componente del olor a mar. El blog lo creé durante una temporada que estuve en Madrid. Como el mar era una de las cosas que más echaba de menos de A Coruña, decidí llamarlo así.
-¿Cuál es el tema que atrae un mayor número de visitas en su blog?
-Uno sobre el azul que creó el artista Yves Klein. Lo publiqué hace años y es el que más visitas registra. Es un color muy especial, que él consiguió y patentó tras ponerse en contacto con varios científicos. Tiene una textura aterciopelada. Lo que me deslumbró fue su intensidad, su opacidad y esa luz que desprende. Nunca antes había visto algo así.