Los ingleses tomaron de nuevo la ciudad

Rodri García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

MARCOS MÍGUEZ

Los 8.000 turistas recibieron todo tipo de ofertas, hasta ir a Santiago por 120 euros

21 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La mayor parte entró durmiendo en el puerto. Están de crucero y no era cuestión de madrugar, aunque el colorido del amanecer de ayer sobre la bahía de A Coruña bien merecía restarle unos minutos al sueño. Fueron unos ocho mil turistas, la mayor parte ingleses, los que llegaron en tres trasatlánticos y tomaron de nuevo la ciudad, esta vez en son de paz. Además, lo hicieron de manera un tanto remolona ya que no fue hasta eso de las diez de la mañana cuando los cruceristas empezaron a salir masivamente de los barcos. Muchos de ellos aprovecharon los vehículos habilitados por la Compañía de Tranvías para acercarse hasta el punto de salida, un espacio donde los responsables de Turismo Coruña habilitaron una oficina de información. Este era el lugar donde, una vez en tierra, recibían las primeras ofertas para ocupar las nueve horas de estancia en la ciudad (en el caso del Rotterdam la escala fue de casi once horas).

De todos modos, decenas de vehículos fueron llenándose con turistas para distintos destinos, un buen número hacia el centro comercial Marineda, otros para un recorrido por la ciudad. Esto último también lo ofertaban un grupo de taxistas estacionados en la Avenida do Porto (el precio eran 40 euros), mientras que otros planteaban a los turistas viajar a Santiago por 120 euros. Entre la múltiple oferta había también quien se preocupaba por el espíritu de los que llegaban con un puesto sobre la Biblia. No fue la única alusión al espíritu ya que a una pareja que, con pantalones cortos, entró en la iglesia de San Nicolás para escuchar misa una parroquiana les proponía que se llevaran algunos de los folletos de la entrada. «No españoles», aclaró el hombre.

Después de desembarcar y antes de llegar a las galerías de la Marina, los cruceristas ya se encontraron con una exposición de fotos, Territorio expandido, que estaba siendo instalada y se inaugura mañana. En uno de los locales de la zona se podía ver como iba ampliando terraza a medida que los cruceristas se iban sentando a tomar consumiciones que iban del café al vino.

«¡Oh! Is beautiful», exclamaba una mujer al entrar en la plaza de las Bárbaras, mientras en la otra esquina otro grupo hacía fotos.

En la torre de Hércules, en las tiendas de la calle Real, en los jardines de Méndez Núñez y hasta en los bancos del interior deLos Cantones Village era posible ver a los cruceristas; en este último lugar, al igual que otros cercanos con conexión a wifi, había tripulantes hablando por teléfono o usando ordenadores. En la plaza de María Pita los cruceristas repartieron su atención entre las fotos y la concentración ante el Ayuntamiento.

Al regresar al barco muchos de los cruceristas lo hacían cargados con bolsas de Gadis, como si hubieran salido a hacer la compra al supermercado. Y cuando zarparon, esta vez sí, muchos de ellos se situaron en las cubiertas de popa para ver como se alejaba la ciudad que durante unas horas habían tomado.

«Ventura»: 3.400

Desde Gibraltar

Llegó a las 8.15 horas procedente de Gibraltar y a las 17.00 horas salía para Southampton.

«Aida Vita»: 1.150

Procedente de las Azores

A las ocho de la mañana entró este barco que atracó en el muelle Calvo Sotelo norte.

«Rotterdam»: 1.200

De Cádiz a Falmouth

Esta es la ruta del trasatlántico que fue el último en zarpar ayer del puerto coruñés.