La céntrica calle iniciaba un largo proceso de cambio en la primavera de 1996
02 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La Franja iniciaba un largo proceso de cambio de imagen. La pavimentación del tramo comprendido entre María Pita y la calle Trompeta costaría la friolera de 15 millones de pesetas, debido a la calidad de los materiales que se estaban empleando. Eran, sin embargo, esos mismos materiales los que más críticas negativas recibían de vecinos y comerciantes. Y no a causa de su precio, sino por una cuestión estética: los adoquines eran oscuros, prácticamente negros. Frente a los detractores estaban quienes agradecían unas obras que llevaban tiempo demandando, por lo que dejaban en un segundo plano cualquier otra consideración.
A este proyecto inicial lo sucederían otros, hasta que, más de dos años y 60 millones después, la Franja al lograse al fin su nuevo aspecto, con 22 escudos luciendo entre adoquines negros.