«Ayudar a los desfavorecidos es una obligación», asegura el presidente de Sor Eusebia al presentar el concurso de ideas para diseñar las casas de quienes duermen en la calle
19 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Lleva más de 30 años soñando. Y no es el único, aunque la meta parezca utópica. «Tanto Carmen Rodríguez-Losada Trulock (fundadora del Hogar de Sor Eusebia) como yo teníamos este objetivo: dar una solución a la gente que duerme en la calle». Lo contaba ayer José Vicente Martínez Rico, actual presidente y cofundador de dicha institución. Lo hacía en la Escuela Superior de Arquitectura en la presentación del «Concurso de ideas para equipos mixtos de arquitectos profesionales y estudiantes de arquitectura de la UDC». El plazo para presentar propuestas está abierto desde ayer hasta el día 1 de junio; hasta el 11 de mayo se pueden consultar las dudas (etsacdir@udec.es); los resultados será publicados a finales de junio y en septiembre habrá una exposición en la Escuela con los trabajos presentados.
Este proyecto, denominado Micasita, tiene como objetivo el de construir módulos habitacionales para personas sin techo, «con una superficie de siete metros cuadrados, donde cada uno tendrá la cama, la mesita, el armario para sus cosas, el lavabo y el váter», indicó Martínez Rico.
Inicialmente está prevista la construcción de 20 casas de este tipo y un local social en las inmediaciones de las mismas, desde el que se prestarían diversos servicios a los inquilinos. «Algo así como el bar del pueblo», decía el presidente. Dicho local forma parte también del concurso de ideas que promueve la Escuela de Arquitectura. En cuanto a la ubicación de todo ello, por el momento no se ha concretado, puesto que la parcela de Sor Eusebia que está en las inmediaciones de su sede, en Bens, no tiene superficie suficiente, según la legislación, para acoger el proyecto.
En cuanto a los usuarios de estas casas Martínez Rico indicó: «La clave es proporcionarles independencia porque hay gente que prefiere morir en la calle antes que perder su libertad». Por este motivo, cada uno de los usuarios contará con una llave de su casa, «podrá entrar y salir cuando quiera», decía el presidente. Cifró en unas 90 personas las que duermen en la calle en A Coruña.
Y sobre la forma de elegir a las personas que ocuparían dichas casitas, Martínez Rico argumentó: «El test para elegirlos será el corazón de los voluntarios que ayudan de forma totalmente desinteresada en Sor Eusebia». Para ello, «los voluntarios saldrán por las noches a las calles para ver a la gente y tratar de convencerlos, porque es gente con una personalidad muy fuerte, muy acusada». En esta línea comentó varios casos, entre ellos el de Pepe, el Pescador, «que cuando estaba muy mal, hecho una piltrafa, aceptaba que lo lleváramos un tiempo para Sor Eusebia; después de estar allí dos o tres meses, cuando se recuperaba y esta guapo, se volvía a marchar».
Colaboración oficial
Después de sentenciar «hay muchísima gente buena, mucha más que mala», Martínez Rico explicó que el proyecto lo tienen casi financiado. Lo que sí demandó es la colaboración oficial en los diversos trámites para la puesta en marcha del mismo. En este sentido recordó que el proyecto ha sido presentado en la consellería de Política Social y en el Ayuntamiento de A Coruña.