El presupuesto y la competitividad, los retos del nuevo rector

Ana Lorenzo Fernández
ANA LORENZO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Julio Abalde considera que el nuevo equipo de gobierno no tendrá problema para cuadrar las cuentas de la Universidad

05 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Julio Abalde tenía claro que iba a ganar las elecciones a rector. Sabía que las cosas estarían difíciles con el sector de los profesores, no porque estén descontentos con el gobierno de Nova Luce, asegura, «sino porque hay unas cuestiones que priman muchas veces y que tienen que ver con la forma de gestión interna más que con una campaña o con un programa de gobierno que se presente». Para el catedrático en Microbioloxía es mucho más significativo el respaldo obtenido por el personal de administración y servicios (PAS) y sobre todo por los estudiantes, que volvieron a batir récord de participación (con un 26,6 %, el segundo mejor registro tras el 36 % que había logrado José María Barja en su primer mandato). «Y eso que se decía que el voto electrónico era una metodología que podía dificultar la participación de los estudiantes. Yo creo que a los alumnos, si se les presenta un programa y se les dice claramente lo que se defiende como modelo, se movilizan, participan y aquí ha quedado demostrado», afirma.

Ese programa que tan bien cuajó entre el alumnado tiene como primeros objetivos: intentar tener las reuniones protocolarias que corresponden con los ayuntamientos de A Coruña y Ferrol «para empezar a trabajar en proyectos conjuntos, aunque nuestro primer reto es empezar a elaborar los presupuestos del año que viene». Cree que los problemas que la UDC tuvo este curso para disponer de efectivo [tuvo que congelar los gastos corrientes durante tres meses y pedir un adelanto a la Xunta de la partida presupuestaria de este año que normalmente se cobra en enero] no pasarán factura, «porque el año que viene hay un nuevo plan de financiamiento, y tenemos que empezar a ver el reparto de la Xunta. Tenemos que empezar a poner nuestro programa y nuestras prioridades encima de la mesa y hacer el presupuesto correspondiente», afirma, al mismo tiempo que confía en llegar a un buen resultado y a un buen acuerdo.

Reclamación

Esta disponibilidad para llegar a acuerdos con la Xunta no tiene porqué verse influida por la demanda que la UDC puso en los tribunales sobre el mal reparto del anterior plan de financiación gallego, y por el que le reclama al ejecutivo gallego y a las otras dos universidades 8,3 millones de euros. «El litigio sigue su curso, y la justicia tiene sus tiempos. Nosotros vamos a seguir trabajando con el presupuesto del que dispongamos y con los ingresos de los que dispongamos, y la justicia decidirá: si nos da la razón bien, y sino también», afirma el rector electo, que será el encargado de inaugurar la residencia universitaria tan demandada por sus antecesores. «No es mérito mío, es el de todos los rectores que estuvieron trabajando para que eso fuera posible. Yo simplemente cortaré la cinta en plan protocolario, pero yo espero que estén conmigo el rector Barja y el rector Armesto, que trabajaron denodadamente para conseguir esa infraestructura».

Otras de las metas de su mandato serán mejorar la competitividad de la UDC, apostando por una mayor calidad en la docencia y en la investigación, así como por la internacionalización.