La baja de dos ediles del PP y la abstención del PSOE y BNG liberan 5 millones de Emalcsa
A CORUÑA CIUDAD
El interventor puso un segundo reparo de legalidad a Culturas, por vender las entradas de Maná antes de firmar el contrato
17 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Fue tarde de reuniones ayer para los miembros de la corporación en donde por una vez la mayoría numérica de la Marea, al faltar dos concejales del PP en la junta electoral de Emalcsa le permitió ejecutar la operación de trasladar 5,5 millones de las cuentas de la empresa de aguas a los fondos municipales, aunque condicionado a que la empresa de la EDAR consiga un crédito para pagar lo que debe a Emalcsa por el inicio de las obras de construcción.
La ausencia de Miguel Lorenzo y Mariel Padín, ambos por cuestiones médicas, en el encuentro, así como la abstención del PSOE y BNG en ese punto, permitió que los nueve votos de la Marea, ya que también sufrieron la baja de Eugenia Vieito, fuesen suficientes para llevar a cabo la aprobación. Desde el PP se esgrimió que aunque estaba a favor de esta operación contable no así de que quedase condicionada a terceros. En ese sentido, propusieron que se retrasase el acuerdo hasta que la compañía de aguas coruñesa tenga la liquidez necesaria para hacer el pago.
El PP reprochó a la Marea que en los tres meses de gobierno no haya apremiado ese cobro y criticó lo que calificó como nula capacidad de gestión del gobierno municipal, lo que, a su entender, puede complicar incluso que se lleve a cabo con esta aprobación. El PP se quedó solo en la aprobación de las cuentas generales de Emalcsa correspondientes al ejercicio pasado, ya que el resto de grupos optaron por la abstención, al haber mostrado en su día reparos a algunas partidas como las de Coruña Smart City.
Reproches en el IMCE
También ayer se celebró la reunión del consejo rector del Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE), aunque no con tan buenos resultados para la Marea, ya que allí se informó del segundo reparo de legalidad a Culturas por un concierto celebrado en el Coliseo. El interventor cuestiona que se pusiesen a la venta y se fijase el precio de las entradas del concierto de Maná, celebrado el pasado 26 de agosto, cuando no se firmó el contrato con la banda hasta el día antes de su actuación.
En este caso, el informe suponía un reparo de la legalidad no suspensivo, diferente al que puso al concierto de Sting, en donde sí lo era. Por otra parte, desde el PP se cuestionó que solo se le permitiese ver el expediente, pero no copiarlo ni fotografiarlo.