La glorieta del pavo real conectará directamente con la autovía A-6 sin pagar peajes
11 mar 2015 . Actualizado a las 11:20 h.Lo que era una realidad a trozos pasará a serlo completa -casi- desde el sábado próximo. Ese día se inaugura, al fin, la tercera ronda, una de las obras más largas que han visto los coruñeses, ejemplo de actuación eternamente pospuesta y que, por fin, se verá rematada, a la espera de que en cuestión de unas semanas se complete el paso entre Elviña y el Birloque sobre la avenida de San Cristóbal.
Hasta ahora, la tercera ronda ya permitía hacer en un par de minutos el camino entre la rotonda del pavo real y el centro comercial Marineda City, un trayecto que antes, sin demasiada mala suerte, podía llevar media hora. Esa vía tendrá ahora su prolongación para el fin para el que fue concebida: se podrá alcanzar ya el tramo de la Zapateira -que lleva unos años funcionando con el enlace de Alvedro- y llegar así en unos minutos desde el polígono de Los Rosales hasta la A-6 en Ledoño (Culleredo) sin tener -al fin- que pagar más peajes y pudiendo evitar otras vías con altas concentraciones de tráfico que ahora, de paso, se verán aliviadas y soportarán menor presión.
Alcanzar la A-6 no es la única utilidad de la largamente esperada carretera. Quienes vivan en la Zapateira apreciarán la apertura del tramo pudiendo evitarse Alfonso Molina, convirtiendo esa zona en un espacio que por fin tendrá unas conexiones aceptables con la ciudad. Los usuarios del campus de Elviña, lógicamente, también se beneficiarán del nuevo vial.
Tráfico a los polígonos
La ciudad podrá mejorar también su tráfico interno con la tercera ronda, eliminando tráfico pesado de sus calles. Los vehículos que hasta ahora las empleaban para acceder a los principales polígonos industriales podrán ahora evitarse el trago y evitárselo también al resto de los conductores. La autovía les permitirá llegar más ágilmente a Pocomaco y la Grela, y también a Vío.
Otro colectivo que se beneficiará considerablemente del tramo que ahora abre Fomento será el de los vecinos de Novo Mesoiro. El barrio más joven de A Coruña, con unos 10.000 vecinos censados y creciendo constantemente en población, era también hasta ahora uno de los peor comunicados, con la única posibilidad real de llegar a la ciudad a través de la conexión entre Pocomaco y Alfonso Molina, con la correspondiente vuelta y los atascos para poder llegar al centro.
Desde el sábado será posible usar esos servicios. Solo habrá que esperar algo más para una de las obras que más tiempo llevan castigando a los usuarios, la de Lonzas. El motivo es que en esa zona se incluyó, con la actuación ya en marcha, una mejora a propuesta del gobierno local, la construcción de un paso elevado para coches, bicicletas y peatones, entre Elviña y el Birloque, enlazando las calles Glasgow y Picasso. Será ese cambio el que retrase algo más la apertura en ese punto, si bien se encuentra ya muy avanzado.
A través de Salgado Torres se podrá acceder también a la glorieta de Lonzas, que será desde muy pronto un gran nodo de distribución de tráfico.
Ya solo es cuestión de tiempo, y de poco tiempo, que la entrada a la Grela por San Cristóbal deje de ser una trampa para los conductores como lo ha sido durante años.
Ocho años de obras y 200 millones
Lo que en teoría no iba a ser un proyecto faraónico acabó siéndolo. Sobre el terreno, 13 kilómetros de carretera con sección de autovía y algunas variantes (Alvedro) y salidas era algo que en el 2003 se anunció con un cronograma según el cual hacía más de un lustro que los coruñeses estarían circulando por ella.
Pero todo se truncó. En el 2006 empezaron los primeros desmontes y se apuntaba entonces al 2007 como fecha de la apertura de todo el recorrido.
No fue posible y se hizo por partes. A principios del 2011 quedó abierto el tramo entre la A-6 en Ledoño y la Zapateira. Era una de las partes que correspondía a Fomento. En el último mes de ese año la Xunta completó la parte que le tocaba, los 4,2 kilómetros que van de la glorieta del pavo real a Marineda City. Pero faltaba entonces todo lo que Fomento no había hecho: Lonzas estaba en obras y sin trazas de acabarse y el recorrido entre Marineda y la Zapateira estaba sin hacer. En total, Fomento tenía 8,8 kilómetros asignados. Finalmente, el ministerio desbloqueó el proyecto -es decir, consiguió los fondos- para continuar con unos trabajos que acabarán ahora. Suman unos 200 millones de euros de inversión total, que ahora por fin se podrán recorrer.