El alcalde mantuvo un encuentro con los representantes vecinales, que calificaron la cita de «relajada y distendida»
18 dic 2012 . Actualizado a las 12:18 h.El encuentro que mantuvo ayer el alcalde de A Coruña, Carlos Negreira, con los representantes de las asociaciones de vecinos dejó un sabor agridulce entre los asistentes. A pesar de que la reunión se celebró en un ambiente distendido y relajado, según indicaron los allí presentes, el gobierno local no ofreció respuestas concretas ni compromisos firmes a los temas planteados por los presidentes vecinales.
Negreira explicó el esfuerzo que ha estado haciendo el gobierno local durante el último año para conocer la situación real de la ciudad mediante un diagnóstico del estado de los barrios, para tener un control sistematizado y poder actuar de forma más rápida. Por su parte, la presidenta de la Federación de Vecinos de A Coruña y Área Metropolitana, Luisa Varela, solicitó que se revisara la concesión a la Compañía de Tranvías, y preguntó por el funcionamiento de la policía de barrio, ya que a su juicio no está funcionando como debiera. Además, le mostró su disconformidad con la subida del bonobús social, una reivindicación a la que se sumó Juan Chas, presidente de la Federación de Vecinos Salvador de Madariaga. «Fue una reunión positiva respecto al clima, pero no se concretó nada», dijo Chas.
Otro de los que intervino durante el encuentro, que se prolongó durante más de dos horas, fue Domingo Verdini, presidente de la asociación de vecinos del Castrillón- Urbanización Soto IAR. «Fue un poco para la foto, porque nos contó lo que ya sabíamos. No hubo ningún compromiso. Yo hice una reflexión sobre a dónde conducen determinadas políticas del gobierno local que están provocando enfrentamientos entre los vecinos», dijo Verdini.