Gerardo Crespo, candidato a la presidencia de la Cámara de Comercio de A Coruña, aclaró ayer que esta institución no depende de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG), ya que «son dos entidades diferentes que no se deben inmiscuir en asuntos del otro. El pleno de la Cámara es soberano para decidir su presidente y su comité ejecutivo, y los vocales del pleno son empresarios o profesionales de empresas de nivel, con una larga y contrastada experiencia».
Por todo ello, Crespo consideró que no tiene sentido pensar que estos representantes de la entidad cameral «agachen la cabeza ante una disciplina de voto impuesta desde otra entidad como la CEG». También afirmó que ambas instituciones pueden coincidir o no en sus planteamientos, pero que cada una tiene su independencia a la hora de tomar sus propias decisiones.
Asimismo, el candidato a presidente la Cámara de Comercio recordó que esta es un organismo que está constituido por «empresas de diferentes sectores y es importante recordar que no es un conjunto de asociaciones empresariales», sentenció Crespo.