Estructuras Lago ofrece 2,7 millones y 18 puestos de trabajo para hacerse con Emesa
COIRÓS
La siderúrgica, con sede en Coirós, está en liquidación desde el 2019
12 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Recolocación inmediata de 18 trabajadores, de los 85 que conforman la plantilla, bolsa de empleo en condiciones preferentes para los operarios restantes, y 2,7 millones de euros por las naves, la maquinaria y la parcela de 100.000 metros cuadrados en el municipio coruñés de Coirós. En estos términos se sustancia la oferta que la empresa compostelana Estructuras Lago ha presentado en la subasta convocada por el administrador concursal para salvar los muebles de la siderúrgica Emesa, en liquidación desde diciembre del 2019. Ha sido la única propuesta recibida por el notario y en los próximos días llegará a la mesa del juez, que decidirá en última instancia si la unidad de producción, que mantuvo en funcionamiento Isolux hasta el 2015 y desde entonces el Grupo Soil, puede transmitirse finalmente a Lago. Y en este procedimiento, que se prevé que se dilate a lo largo de varias semanas, no tendrá importancia menor el dictamen de los acreedores -Abanca y una fusionada de 8 bancos-, con los que Emesa firmó hipotecas sobre el suelo y los 40.000 metros de las naves, a los que adeuda alrededor de 7 millones de euros y que ahora podrían vetar su traspaso.
El administrador concursal valoró los activos en 13,5 millones de euros -3 millones en maquinaria y 10 millones por los terrenos y las instalaciones de fabricación, pintura y corte de Coirós-, pero una vez cerrado el plazo para presentar ofertas a la puja mostró su disposición a hacer prevalecer la viabilidad de la compañía y las garantías de empleo sobre el importe que eventualmente pudieran ofrecer por los bienes.
Bolsa de empleo
Emesa tiene 85 trabajadores, sometidos a un ERTE desde hace ocho meses y a la espera de cobrar las nóminas de septiembre y octubre, y solo 18 de ellos tendrían ocupación inmediata bajo el paraguas de Lago. El resto, entre 60 y 70 personas en función de jubilaciones y recolocaciones en otras firmas, pasarían a una bolsa de empleo en condiciones preferenciales durante el 2021 y 2022 para incorporarse a la plantilla en el momento en que el nuevo propietario vuelva a contratar.
Estructuras Lago es una vieja conocida de la plantilla de Emesa, con la que trabajó en diferentes contratos, y era también la gran esperanza de esta subasta después de cuatro años a la deriva en los que el Grupo Soil no hizo inversiones ni un plan a largo plazo que permitieran pensar en un proyecto industrial sólido. Detrás acechaba, sostiene el comité, un interés especulativo que acabó por rematar a una firma que creció con el auge de los fustes eólicos, cayó con la crisis del 2008 y ahora aspira a la reconversión.