La compostelana Estructuras Lago presenta la única oferta en la subasta para salvar a Emesa

Montse CARNEIRO A CORUÑA / LA VOZ

COIRÓS

César Delgado

La empresa planea en la parcela de Coirós un proyecto industrial a largo plazo que ahora pasará un complejo procedimiento judicial sin garantías de que se le transmita finalmente

07 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Estructuras Lago, una empresa compostelana de 30 trabajadores que en los últimos meses se interesó por el estado de liquidación de Emesa, ha presentado finalmente la única oferta para adquirir la unidad de producción de la antigua filial de Isolux en la subasta convocada por el administrador concursal para salvar la viabilidad y parte de los 85 empleos de la compañía.

Lago era la gran esperanza de la plantilla de Coirós, que desde la venta al grupo Soil en el 2015 ha venido denunciando una operación especulativa para exprimir a la metalúrgica y obtener plusvalías sin inversiones ni planes de futuro. Los trabajadores temían que el fracaso se reeditase y algún fondo buitre acudiera ahora a la subasta para hacerse con los activos, valorados en 13,6 millones de euros, aunque en el pliego de la puja no se estableció un precio mínimo.

Con su oferta, el objetivo de la compostelana, que conoce bien las instalaciones y a los trabajadores, pues llegó a firmar contratos de montaje con Emesa, es desarrollar un proyecto industrial a largo plazo en la parcela de Coirós -100.000 metros cuadrados de suelo, maquinaria y siete naves de fabricación, pintura y corte que suman otros 40.000 metros- y trasladar, si no la totalidad, una parte de la unidad productiva que mantiene en Castilla-La Mancha.

Antes deberá pasar un complejo procedimiento judicial que podría dilatarse varias semanas y en el que los acreedores con privilegio especial de Emesa -Abanca y una fusión de ocho bancos con los que mantiene una deuda de 7 millones de euros, podrían ejercer su derecho de veto.