¿Por qué Coirós no es punto negro?

Toni Silva COIRÓS / LA VOZ

COIRÓS

paco de la abadía

Los vecinos de la N-VI exigen medidas para evitar el goteo de siniestros

15 ago 2015 . Actualizado a las 11:59 h.

En el lugar de Queirís las referencias temporales son los accidentes de la N-VI. Esta semana comenzó con la descarga de maíz de un camión que tiñó el asfalto de naranja. Algunos coches patinaron, pero esta vez no hubo siniestros. Pero con las primera lluvias, en una colisión un poco más arriba, en Colantres, una mujer embarazada perdió a su bebé tras chocar contra otro coche. La colección de accidentes en este arco de la N-VI es infinita, y los vecinos ya no saben cómo llamar la atención de las administraciones para que se ponga fin a este goteo de siniestros que incluso han destrozado sus vidas. «A mi madre la mató un camión», sentencia Óscar Seoane, testigo de múltiples accidentes desde su casa en primera línea de carretera. «Recuerdo una tarde con cuatro accidentes en el mismo punto», indica. La indignación de Óscar y otros residentes de esta polémica curva se multiplica con cada siniestro. Ahora miran con esperanza hacia Cortiñán, ya en Bergondo, donde la Demarcación de Carreteras rehízo el dibujo de las líneas blancas, redujo los límites de velocidad y desde entonces los siniestros se han espaciado en el tiempo, aunque anoche fue atropellado un hombre de avanzada edad que cruzaba por un paso de cebra. Fomento diseñara un costoso proyecto con un paso elevado en el cruce de Queirís. «Pero basta con que se limite la velocidad y Tráfico vuelva a frecuentar este punto con un radar», dice Óscar, que explica que se colocaba en el frontal de su casa hasta principios de este año. «Y entonces la gente iba mucho más despacio», comenta. Coirós quiere que se le reconozca como punto negro para dejar de ver circular bomberos y ambulancias con tanta frecuencia.