Un caminante en A Telva: «Los menores se suelen tirar desde la presa y de cabeza»

María M. Guntín / A. A. CAMBRE / LA VOZ

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Ángel Manso

Augas de Galicia responsabiliza a los jóvenes del riesgo que asumieron al bañarse en A Telva y recuerda que no existe una ley específica que prohíba meterse en el agua

27 feb 2019 . Actualizado a las 19:34 h.

Los tres menores rescatados en la presa de A Telva recorrieron un buen tramo desde la urbanización A Barcala hasta zambullirse en el agua. El camino, de más de media hora de duración, discurre por una senda forestal y termina en el paseo de arena que bordea el río Mero. «En verano hay muchos chavales metidos en el agua y la gente que va a pasear con sus perros también deja que se zambullan, aunque el agua está sucia y salen llenos de fango», explica Carmen de la Fuente, que pasea habitualmente por la zona. «A veces la cascada que forma la presa da miedo», aunque, en ocasiones, explica la mujer, los más jóvenes deciden faltar a clase para reunirse junto al río.

Para llegar a la zona en la que los tres jóvenes se llevaron un buen susto hay que atravesar un tramo de tierra, lleno de plásticos, que pasa al lado de las vías del tren. No es necesario cruzarlas para continuar hasta el río, pero algunas de las personas que pasean por la zona admiten que es habitual ver a los jóvenes pasar por encima de las vías, que no están separadas del tramo por ningún elemento de protección.

«Se suelen lanzar desde la presa, todos son menores y suelo verlos habitualmente por la tarde. Aquí solo se bañan los chicos y se tiran de cabeza, los demás ya sabemos que es peligroso y está prohibido», explica Elías Montoya, que también admite que «si no hay una desgracia es por aleatoriedad». El hombre añade que la presa tiene poca profundidad y que, a veces, los jóvenes que se bañan en ella se lanzan de cabeza a pesar de que el suelo del embalse está lleno de piedras.

«La suerte es que, si alguien pide ayuda, por este paseo camina gente continuamente», cuenta Begoña Fernández, residente de A Barcala. La mujer, madre de dos alumnas que estudian en el IES Alfonso X O Sabio, explica que los alumnos que faltan a clase para acudir a A Telva tienen que ser estudiantes de bachillerato, ya que «los de ESO no salen del centro porque no tienen autorización». Por su parte, los que cursan bachillerato «tienen más libertad», añade Begoña Fernández, que también cuenta que en el IES de A Barcala «te mandan las faltas y somos los padres los que tenemos que firmar para justificarlas». «Os rapaces escarmentaron porque dende o domingo non vin que se bañara ningún», cuenta otro vecino de la zona que pasea habitualmente por la zona de la presa.