La Xunta da luz verde a la ampliación de tres kilómetros de la vía Ártabra

María M. Guntín / A. A. CAMBRE / LA VOZ

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Vía Ártabra
Vía Ártabra MARCOS MIGUEZ

Deja planteada una segunda fase que conectaría el vial con la AP-9 en A Gándara, y no en Cuatro Caminos

22 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La Xunta dio luz verde a la licitación de las obras para ampliar la vía Ártabra hasta la AC-221. Deja preparada además una segunda fase que llevará el vial hasta la AP-9. La inversión total es de 35 millones de euros, 29,6 millones para la primera fase, que comprenderá el tramo entre la N-VI y la carretera autonómica AC-221 (entre San Pedro de Nós y Mabegondo); y 5,4 millones para la segunda, que enlazará la AC-221 con la AP-9. La Xunta impone además que ese enlace se hará en A Gándara, y no en Cuatro Caminos.

En las próximas semanas la Consellería de Infraestruturas licitará los trabajos. Además, prevé una modificación en el contrato para ejecutar la segunda fase de la obra en cuanto el Ministerio de Fomento la autorice. La primera fase de las obras incluye la construcción del tronco de la vía Ártabra, de aproximadamente tres kilómetros de longitud, entre la N-VI y el nuevo enlace con la AC-221.

Enlace a tres niveles

Entre lo más destacado del proyecto está el nuevo enlace con esa carretera autonómica, que tendrá tres niveles. En el actual se ejecutará una glorieta que conectará los ramales de salida y entrada a la vía Ártabra ?que cruzará la rotonda por el piso inferior? y la N-VI. Sobre esta glorieta pasará la nacional, que discurrirá por un viaducto con dos carriles en cada sentido y tendrá una longitud de 1,2 kilómetros.

Las obras se completarán con el enlace de la AC-221 y la conexión con el polígono de Espíritu Santo. Aquí, la Xunta ejecutará una glorieta sobre la que pasará, a través de un viaducto, la nueva autovía. Desde la rotonda se accederá a la AC-221 y al polígono industrial a través de una nueva vía, de 1,1 kilómetros de largo y con un carril en cada sentido.

Para la segunda fase, que llevaría a cabo la misma empresa que acometa las obras de la primera, es necesario aún el plácet de Fomento. Las obras conectarán la vía Ártabra con la AP-9 en A Gándara, según el proyecto de la Xunta. El Concello de Cambre, en desacuerdo, sigue firme en su intención de que el enlace se haga en Cuatro Caminos.

Ante el proyecto de la Xunta, Audasa planteó en su día la necesidad de crear un tercer carril en la AP-9 desde la conexión con la vía Ártabra hasta A Coruña, ante la previsión de incremento del tráfico. La Delegación del Gobierno encargó entonces una auditoría independiente sobre este asunto. Finalmente, ese informe, según Infraestruturas, recomienda la creación del tercer carril, pero con independencia de este proyecto, por lo que no habría motivo para paralizar la obra de la vía Ártabra mientras no se acometa el nuevo vial en la AP-9.

Discrepancias

Por su parte, Cambre rechaza el enlace con la AP-9 en A Gándara. Sostiene que la mejor solución sería hacer la conexión en Cuatro Caminos. Explica por un lado el alto impacto medioambiental para A Gándara, al ser un humedal protegido, y recuerda que presentó un informe de un biólogo que desaconseja esa alternativa.

Además, alude a «deficiencias en la tramitación del proyecto», por las que solicitó una medida cautelar al Contencioso-Administrativo para pararlo, vía en la que confía actualmente. Asimismo, dice que el proyecto, con un alto coste, «podría modificarse con la resolución de Fomento, si finalmente no aceptase la segunda fase en los términos que plantea la Xunta», y eso podría suponer «que los vecinos de Cambre perdiesen dinero».

Otro punto pendiente es cómo pagarán el peaje los conductores que accedan por la vía Ártabra a la AP-9 y transiten hasta A Coruña. Xunta, Ministerio y Audasa resolverán esto mediante un convenio que determinará si el peaje lo paga una Administración, en la sombra, o los usuarios.