Los emprendedores gallegos, a la caza de mercados emergentes

pablo varela / A. A. A CORUÑA / LA VOZ

CAMBRE

Exporpymes, evento de internacionalización organizado por la Cámara de A Coruña
Exporpymes, evento de internacionalización organizado por la Cámara de A Coruña ANGEL MANSO

Apuestas innovadoras a partir de un queso de pastoreo, una bebida isotónica o una ginebra de Cambre

21 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Móviles y tarjetas se intercambiaban a toda velocidad en el recinto ExpoCoruña, que ayer, entre muchos otros, acogió acentos magrebíes, de la Europa del Este y también de las cuatro provincias gallegas para interconectar a todos en la quinta edición de ExporPymes.

Casi 70 importadores y exportadores de distintos orígenes mostraban y analizaban productos susceptibles de hacerse un hueco en el mercado internacional. Y alguno como Enrique Peña, que produce la ginebra Vánagandr en una fábrica de Cambre, ya logró adentrarse en México hace dos años tras venir a esta feria. «Aquí están presentes el 100 % de los trabajadores de mi empresa», contaba con sorna. Es decir, él. Desde el área metropolitana de A Coruña ha alcanzado Dinamarca y las Islas Feroe, pero «sigo buscando posicionarme en el mercado gourmet, donde puedo defenderme de las multinacionales», dice.

A contracorriente también rema Álvaro García, que se aventuró en el 2017 en el mundo de los quesos, pero con un ojo en el pasado. «Aunque en el aspecto pueda parecerlo, no hacemos parmesano. Sí usamos técnicas semejantes, pero Galmesano es un producto diferente con leche obtenida de 27 explotaciones ganaderas en régimen de pastoreo de cerca de Arzúa», cuenta. García incide en ese elemento casi artesanal para mostrar el matiz. «Es una técnica casi en desuso, alejada de lo industrial», explica. Y han comenzado a asomar la cabeza en Castilla-La Mancha, Madrid y Cataluña: «Allí son muy de sus quesos, pero aún estamos empezando nuestra distribución».

A pocos metros de allí, los responsables de Quescrem, de Terra Chá, hablan de una experiencia de casi diez años también en el sector lácteo. Concretamente, en los quesos de untar. Empezaron en 2006 como un spin-off de la Universidade de Santiago y ahora exportan directamente a Lituania, China o Singapur. Entre sus horizontes de futuro vislumbran Indonesia y Japón, pero los avances también son de producto: han creado una línea de quesos enfocada a los más pequeños y otra para deportistas.

La recuperación energética fue lo que llevó, por otro lado, a que Raúl Anta diese forma a Refix, una bebida isotónica con poco más de un año de vida que, ayer, vio cómo su primer gran encargo desembarcaba en Nueva York: un contenedor de 90.000 botellas con agua de mar de Camelle, agua dulce, limón y stevia tras recibir un interés inicial por Instagram. «Vengo a ver si sale algún contacto», explicaba.

Lo previsible es que, en el entorno agroalimentario, sea el Reino Unido el que más difícil lo ponga. Alberto Oliva, de la Cámara de Comercio de España en Londres, instaba a ser realista: «Es un sector más saturado porque allí hay importadores que ya llevan años de recorrido en materia de promoción». Con todo, lanzaba un mensaje positivo: «Es un proceso arduo y largo, pero una vez se entra, ofrece beneficios interesantes».