El Concello de Cambre inició ayer las obras de demolición de las últimas casas de la calle Balado, un tapón urbanísticos cuya desaparición permitirá, según el gobierno local, abrir la calle y crear un espacio público en un proyecto futuro que ya está en fase de licitación.
Los trabajos para la demolición ya se habían iniciado a principios de año con el derrumbe de la primera edificación en la conexión con la AC-214, actuación que tuvo que aplazarse ante el recurso presentado por los propietarios de una vivienda anexa. Ahora, con la decisión del TSXG sobre la catalogación de ruina de uno de los inmuebles, que da la razón al Concello, se llevará a cabo la demolición tanto de la vivienda como de una edificación de dos plantas situada en la misma zona.
Una vez esté liberado el espacio, se mejorará la accesibilidad con la apertura de la calle y se creará una plaza pública con cargo al superávit municipal.