Xunta y alcaldes piden que no se paralice la vía Ártabra por Audasa

Elena Silveira
Elena Silveira CAMBRE / LA VOZ

CAMBRE

MARCOS MIGUEZ

Califican de «chantaxe» la petición de un tercer carril que retrasaría la obra 10 años

31 ago 2018 . Actualizado a las 23:50 h.

Las alegaciones presentadas por Audasa al proyecto de construcción de la vía Ártabra (conexión entre la N-VI y la AP-9) han sorprendido y ofendido a buena parte de los responsables municipales del área coruñesa. La mayoría considera que las aportaciones de Audasa pretenden condicionar el plan viario comarcal y presionar al Ministerio de Fomento para «seguir engordando a súa conta de resultados». Entre esas alegaciones destacan dos; en una de ellas solicita que se amplíe con un tercer carril la AP-9, entre Alfonso Molina y la incorporación en Cuatro Caminos (Cambre), aduciendo que con el enlace de la vía Ártabra la autopista asumirá entre 9.000 y 10.000 vehículos más al día. En otra de las alegaciones Audasa pide que se firme un convenio sobre las condiciones de la explotación antes de la licitación de las obras.

Ambas propuestas retrasarían más la ejecución del proyecto, al menos diez años. La Xunta trasladó al Ministerio de Fomento la necesidad de licitar las obras y abordar durante el proceso de contratación y ejecución la fórmula de financiación del tramo de la AP-9 por el que circularán los vehículos procedentes de la vía Ártabra. Reclama también que dé prioridad a los intereses de movilidad y seguridad viaria de los vecinos frente a los económicos de Audasa, «emitindo un informe favorable ao proxecto da vía Ártabra». Fomento deberá emitir ahora el informe sobre las alegaciones de Audasa.

El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, aseguró ayer en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, que la situación es «alarmante» porque demuestra que la empresa Audasa «parece que é a dona do país grazas á manga ancha dos que nos gobernaron e nos gobernan». Incidió en que sería muy grave que se perdieran los 34 millones de euros que en este momento tiene la Xunta para abordar las obras. «E sería responsabilidade única do Goberno da nación», aseguró. «Se hai un compromiso firme da Xunta para contratar a obra, non se poden poñer chantas ás rodas. Sería gravísimo, primeiro polo investimento perdido, segundo polo traballo e, terceiro, polo servizo á comarca da Coruña, que necesita infraestruturas».

Una conexión «esencial»

El alcalde de Sada, Benito Portela, indicó que una concesionaria «non pode chantaxear a execución do plan viario comarcal, na conexión da vía Ártabra coa AP- 9, unha conexión que é esencial tamén para Sada». Y el gobierno local de A Coruña se sumó a estas críticas indicando que las concesionarias «non se presentan ás eleccións, polo que non poden decidir polas Administracións públicas nin sometelas a chantaxes».

El caso ha llegado al Parlamento gallego y En Marea solicita al Gobierno central el traspaso de la AP-9 a Galicia.

El alcalde de Cambre, Óscar García Patiño, se desmarcó de esta línea y centró sus criticas en la Xunta, indicando que sus responsables ya conocían en el 2009 las «advertencias de Fomento y de la concesionaria». También le recrimina que se comience el proceso expropiatorio «sin la certeza legal de poder hacerlo».

Respuesta de Fomento

Desde el Ministerio de Fomento no aclararon ayer cuándo se emitirá ese informe definitivo sobre las alegaciones ni en qué sentido será, tan solo indicaron que se trata de una conexión autonómica a la AP-9 y, por tanto, «necesita una autorización al respecto». «Actualmente se están estudiando las alegaciones de todas las partes implicadas», se limitaron a contestar. Audasa no respondió ayer a las preguntas de La Voz de Galicia.

34 millones

Coste del tramo

Para este año estaban consignados 4 de los 34 millones.

3,6 km.

Longitud

El nuevo tramo de la vía Ártabra tendrá 3,6 kilómetros.

2001

Primeros pasos

Las obras se iniciaron hace 17 años y no están acabadas.

Los usuarios del enlace de Cambre pagan los diez kilómetros que hay desde A Coruña

Un conductor que se incorpore a la AP-9 en Cambre, en el enlace de Cuatro Caminos, pagará la misma tarifa que otro que lo haga casi diez kilómetros antes, en la avenida de Alfonso Molina o, un poco más adelante, en el entronque de A Barcala. Y lo mismo ocurre con el usuario que llega desde Santiago: tiene que pagar el recorrido completo hasta A Coruña, aunque salga antes de la autopista. La conexión de la AP-9 en la rotonda de Cuatro Caminos, en el municipio de Cambre, es en realidad un semienlace: aunque existen ambos sentidos de circulación, tan solo hay servicio de entrada y salida de la autopista desde o hacia Santiago. Es decir, los conductores que vienen desde la capital de Galicia pueden salir en este entronque y también entrar en la autopista con dirección a Santiago. Sin embargo, no hay posibilidad de coger allí la AP-9 para llegar hasta A Coruña, ni tampoco dejar la AP-9 si uno proviene desde A Coruña. Es decir, tan solo da servicio a los que realizan el trayecto que pasa por el peaje de Macenda. De hecho, en los entronques de Cuatro Caminos no hay cabinas de peaje ni tampoco un dispositivo que confirme el punto de entrada a la autopista para, después, pagar en proporción al recorrido hecho.

A pesar de que Fomento determinó que es preceptivo eliminar el enlace de Cuatro Caminos para construir el de A Gándara, Audasa en sus alegaciones pide que no se elimine este semienlace, ya que de esta forma podría seguir cobrando a algunos usuarios de la AP-9 por un tramo de diez kilómetros que, en realidad, no están realizando.