Viaqua descarta que el origen del brote de Betanzos esté dentro de la red de abastecimiento

Antes de que estallase el brote de gastroenteritis en Betanzos, algunos vecinos vivieron unos extraños episodios que luego vincularon con la intoxicación del agua. Varios integrantes de clubes deportivos de base señalaron a este periódico que el viernes de la semana pasada habían notado un olor nauseabundo muy intenso en el agua de las duchas del complejo deportivo del Carregal, y que salía «con un color más oscuro». Muchos deportistas volverían a reencontrarse ese fin de semana en el PAC retorciéndose de dolor de estómago.

Viaqua, la empresa concesionaria que gestiona el agua en Betanzos, asegura desconocer estos hechos, pero insiste en que «la causa no estaría relacionada con problemas en la red». «Con la información actual, todo parece indicar que el origen del virus podría estar en un vertido de aguas residuales urbanas al río, como ya apuntó el Ayuntamiento», y que posteriormente sería captada a los depósitos, que acabarían contaminando toda la estructura hídrica. Este viernes comenzaron a desinfectar de forma exhaustiva toda la red de abastecimiento así como las instalaciones afectadas, además de intensificar los controles analíticos. Este viernes por la noche se confirmó la presencia de un norovirus, generado posiblemente por un vertido del río Mendo en la zona de captación. De este modo, las autoridades sanitarias mantienen la restricción del agua de la traída para consumo, lavado de alimentos, cocinar o higiene bucodental. «No podemos dar fecha de cuándo se acabará la limpieza de la red, pero será lo antes posible para recuperar la normalidad», indican desde Viaqua.

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