Volverá a intentarse tras la primera jira, el jueves por la noche
17 ago 2022 . Actualizado a las 00:36 h.Pocos días se miró tanto al cielo en Betanzos como ayer. La amenaza de lluvia hacía temer que se frustrase la suelta del globo, símbolo del San Roque. Tanto fue así, que por la mañana el Concello advirtió que el lanzamiento del aerostato estaba condicionado a la meteorología y a lo que sucediera a las 23.30 horas, cuando tradicionalmente y tras una bomba de palenque se anuncia el proceso para el hinchado del artefacto.
Las redes se llenaron de capturas de previsiones con claros de esperanza para la medianoche. Pero, finalmente no se cumplieron y el aerostato y sus dibujos alusivos a la pandemia vieron frustrada su salida, la primera prevista tras dos años de parón para evitar aglomeraciones durante la pandemia. La alcaldesa, María Barral, confirmó cerca de la medianoche que se aplazaba por la lluvia, el viento y la humedad, en un momento en el que la plaza estaba a rebosar, porque fueron muchos los que no se dejaron amedrentar por el agua.
Las redes se llenaron de capturas de previsiones con claros de esperanza para la medianoche. Pero, finalmente no se cumplieron y el aerostato y sus dibujos alusivos a la pandemia vieron frustrada su salida, la primera prevista tras dos años de parón para evitar aglomeraciones durante la pandemia. La alcaldesa, María Barral, confirmó cerca de la medianoche que se aplazaba por la lluvia, el viento y los niveles de humedad, en un momento en el que la plaza estaba a rebosar, porque fueron muchos los que no se dejaron amedrentar por el agua.
Tres intentos
El ritual del globo está fijado incluso hasta en los imprevistos. Claudino Pita Pandelo, a quién se debe uno de los elementos diferenciadores de esta fiesta, dejó estipulado qué hacer si fracasa el primer intento. El día 18, coincidiendo con la primera jira de Os Caneiros, se volvería a intentar de nuevo. De no poder soltarlo se prevé un segundo intento en la noche del 25, jornada de la segunda jira.
Solo se permiten tres oportunidades, de no lograrse las instrucciones fijan que deberá destruirse y habría que esperar al siguiente año para volver a recuperar la tradición. El engranaje de esta peculiar tradición se frustró pocas veces, la última en el año 2018, cuando durante el inflado se rajó por uno de los cuarterones y se optó por repartir trozos del globo entre el público. Con anterioridad, en 1964 no había logrado alzar el vuelo al engancharse en la torre del campanario.
Lo que no impidió la lluvia fue la Función del Voto en la iglesia de San Domingos. La alcaldesa, María Barral, realizó la ofrenda de la ciudad a San Roque, una tradición de la que hay constancia desde 1416. En ella tuvo palabras de recuerdo para las víctimas del covid, los afectados por la guerra de Ucrania, los que padecen la crisis «climática, económicas social e enerxética» y para las mujeres que murieron asesinadas por la violencia machista.