«Necesitamos ir al supermercado a Betanzos desde Oza, tenemos que hacer dieta especial»
BETANZOS
Algunos vecinos de la comarca deciden acudir a municipios limítrofes a hacer la compra ante la falta de alternativas en su propio concello
27 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Las restricciones de movilidad complican cuestiones tan fundamental como la compra de productos básicos. El decreto de la Xunta solo permite desplazamientos a establecimientos comerciales minoristas de alimentación, bebidas y bienes de primera necesidad cuando no haya alternativa en los territorios limítrofes. Desde Oza-Cesuras, algunos vecinos cuestionaban tener que tirar de pescado congelado debido al cierre del municipio, porque allí no hay pescadería, cerró hace tiempo. Sin embargo, muchos reconocen que seguirán desplazándose a concellos cercanos para hacer compras grandes, no se resignan a verse limitados por la oferta de las tiendas de la zona.
«Lo siento si me paran, pero nosotros iremos igual al supermercado a Betanzos desde Oza, mi marido tiene problemas renales y tengo que hacerle dieta especial y aquí no hay las cosas», indicaba Carmen Mosquera, que ayer se desplazó a hacer gestiones a Oza con su marido Cándido Morandeira. «No es solo por el pescado», reconoce este matrimonio, que remarca que también compra en la capital municipal. «Estamos a 6,6 kilómetros de Oza y a 6,4 en Betanzos», indican estos vecinos de Vivente, cuestionando restricciones solo por territorio.
Mercedes Reviejo vive en Dordaño y reconoce que seguirá yendo a Betanzos a hacer compras grandes. «Vivimos en el medio del campo y no hay nada, mi hijo necesita productos que aquí no encuentro, voy al súper de Santalla, pero me faltan cosas», explica una mujer que dejó A Coruña hace dos años para buscar un espacio con más posibilidades para su hijo, que presenta una minusvalía.
En el caso de Coirós, los vecinos recurren al supermercado vinculado a una gasolinera en la N-VI, pero cuestionan que sea su única opción y algunos ya anuncian que seguirán yendo a Betanzos. «En la gasolinera puedes comprar desde leche a golosinas, voy cuando no me queda más remedio, pero me parece caro y opto por ir a Betanzos», explica José Luis Rodríguez, que dice que al trabajar fuera incluso le complica poder recurrir a servicios a domicilio.
En el caso de José María Mato, vecino de Bergondo, reconoce que en su casa van «case sempre a Betanzos a comprar e xa chamamos aos supermercado para ver como facemos para que nolo sirvan a casa», debido a las nuevas restricciones. Recuerda que llevan años esperando la instalación de una superficie comercial en San Marcos, pero el proyecto no acaba de fraguarse. «En Guísamo hai algún supermercado, pero a nós non nos cadra, o que era ben é que poñan un supermercado aquí, que nos fai moita falta», explica este vecino, que reconoce que evitan salir de casa debido a la crisis sanitaria.