Manuel Basoa, de fraile de los leprosos a pregonero en Betanzos

Antón S. Rodríguez BETANZOS / LA VOZ

BETANZOS

CÉSAR DELGADO

El actor de Mugardos, presente en todas las ediciones de la feria medieval, abrirá la 21.ª edición el 6 de julio

10 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Manuel Basoa es como Luis Aragonés. El popular entrenador anunció su adiós del fúbol en mil ocasiones, pero siempre volvía. A Basoa le ocurre algo parecido con la feria medieval de Betanzos. Dice que se va, pero siempre le imploran que regrese, que nadie como él -presente desde la primera edición-, conoce los entresijos de un evento de estas dimensiones. Y un año más, Basoa estará en la feria medieval. Y por la puerta grande. El alcalde, Ramón García, le ha querido reconocer todo su esfuerzo con un regalo que ha emocionado al propio actor, le ha pedido que lea el pregón. «Es un gran honor para mí», responde Basoa, de 84 años, presente en todas las ediciones de la feria medieval. «Soy el único que queda de aquel comité de organización inicial, los he ido confesando a todos», añade jocoso. Durante la conversación con La Voz aún no tiene claro si asomará el domingo 8 de julio por la mañana vestido de fraile para repetir en la expulsión de los leprosos. Y no lo descarta.

Natural de Narón, trabajó en Bazán, emigró a Suiza, y a su regreso fue gerente de una empresa textil en Mugardos. Pero el paso de los años y las casualidades le permitieron también ser actor, uno de sus sueños. Y su carrera de aficionado ha tocado cotas muy altas, como su participación en La rosa de Alejandría, con Juanjo Puigcorbé, o en series de renombre como Mareas Vivas y Terras de Miranda. Y no menos intensa ha sido su aparición en el popular anuncio de Gadis, rodado precisamente en Betanzos. Todo ese bagaje saldrá de alguna manera en el pregón que ya está casi concluido. «Voy a hablar de los betanceiros, por supuesto, de las cosas que hay en la vida de los betanceiros».

Prevé que esta puede ser su última presencia en la feria medieval -pero esto cójase con pinzas-, alega motivos de edad: «El carné de identidad me pesa mucho». Se espera que sea uno de los pregones más emotivos en estos más de veinte años de feria medieval, que incorpora algunas novedades para esta edición, como es la eliminación del Aquelarre. En su lugar se estrenará la que se conoce como Danza de la Muerte, documentada en las historia medieval, y que se perfila como uno de los principales momentos de la feria de este año, en la que también se estrenarán diversos talleres en el campamento medieval.