«El problema del abandono escolar lo estamos viendo en los jóvenes de 20»

CLÁUDIA MORÁN A CORUÑA / LA VOZ

BETANZOS

MARCOS MÍGUEZ

La Cruz Roja pone en marcha un plan para retomar los estudios y de formación para el acceso a un empleo

06 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Clara Tello dirige el departamento de Infancia, Juventud e Igualdad de la Cruz Roja en la provincia de A Coruña. La entidad, que ya cuenta con su propio plan de empleo, acaba de poner en marcha su Escuela de Segundas Oportunidades en la ciudad para luchar contra el abandono escolar y ayudar a los jóvenes de entre 16 y 29 años a encontrar un trabajo, y que cuenta con el apoyo del Ministerio de Empleo y el Fondo Social Europeo. Este año se beneficiarán del programa 25 jóvenes, pero la duración del proyecto es de tres años.

-¿En qué consiste el programa?

-Surgió por las altas tasas de desempleo y abandono escolar que tiene España, de las más elevadas de la Unión Europea. El objetivo es que los jóvenes retornen al sistema educativo o a algún tipo de formación, reglada o no, que les garantice a medio plazo unas oportunidades laborales más elevadas. Lo dicen las estadísticas: cuanta menos formación tienes, el empleo va a ser más precario e inestable. Estamos poniendo el acento en los jóvenes que abandonaron el sistema educativo prematuramente y ahora ven una oportunidad para volver a él y tener una mejor opción laboral.

-¿Qué causas llevan a los jóvenes a abandonar los estudios?

-La cronificación de la pobreza es uno de los grandes problemas. Muchos de estos jóvenes vienen de unos entornos sociales y familiares muy deprimidos, con familias con todos sus miembros en paro o con progenitores con unos niveles de cualificación muy bajos. La realidad es que cuando creces en un entorno social tan complicado, tus posibilidades de salir de él son muy escasas. Cuando en casa hay una situación de baja motivación y los padres a veces están más preocupados porque el dinero no llega a fin de mes, el acompañamiento en la adolescencia, que es una etapa complicada, a veces no aparece. Hay que tener en cuenta que la tasa de abandono escolar de los jóvenes en dificultad social es del 72 %, más del doble de la media nacional. Se produce también por unas bajas expectativas ante el futuro por lo que ven todos los días en los medios de comunicación: o se emigra o no hay empleo. Estamos intentando romper con esa idea de que formarse no sirve para nada. Sí que sirve porque las estadísticas lo dicen.

-Las cifras de abandono escolar son alarmantes.

-El dato a nivel local es muy difícil sacarlo, pero es cierto que la tasa de abandono escolar en Galicia es del 16,4 % y el objetivo de la Unión Europea para el 2020 es que se reduzca al 15 %. A nivel de comunidad autónoma no nos desviamos mucho del abandono generalizado, pero porque se ha ido reduciendo mucho en los últimos años. Lo más preocupante son los jóvenes de más de 20 años que no han terminado el sistema obligatorio, porque el fracaso escolar de hace unos años lo estamos arrastrando ahora. Los de 16 ahora no están abandonando tanto, pero los de veintitantos están ahí y hay que trabajar con ellos.

-¿Cuál es el papel de los centros educativos?

-A veces el sistema educativo no da respuesta a algunas necesidades específicas. La diversidad del alumnado es amplia y hay jóvenes con unas necesidades específicas, pero en una situación de crisis es complicado acceder a unos recursos económicos que se destinen a determinados servicios. A veces, con 30 alumnos en una sola clase es difícil atenderlos a todos. En nuestros talleres de refuerzo la atención es un poco más individualizada, pero esto es complementario a lo que se está haciendo en los centros educativos, como un trabajo en red.

«El curso me ayudó a dar lo mejor de mí y a encontrar trabajo»

Además de la nueva Escuela de Segundas Oportunidades para jóvenes de entre 16 y 29 años, la Cruz Roja lleva tres lustros desarrollando un plan de empleo dirigido a diferentes colectivos, entre ellos menores de 30 años, y que se saldó con un 53 % de inserción laboral en la ciudad de A Coruña en el 2015, con la colaboración de 160 empresas de la provincia. Este año son 360 personas las que se benefician del programa.

Carlos Fernando Donoso, un joven coruñés de 26 años, fue una de las personas que consiguieron un trabajo a través del plan de empleo, consistente en itinerarios de inserción laboral que incluyen cursos y prácticas formativas. Llevaba 4 años sin empleo a pesar de que había realizado varios cursos. «Aunque tuviera titulación de tornero no era suficiente para encontrar un trabajo», cuenta, ya que las empresas «preferían a alguien que ya tuviera experiencia profesional».

Eligió el itinerario de auxiliar de comercio de la Cruz Roja y accedió a unas prácticas como dependiente, hasta que el año pasado consiguió un puesto en el sector. «Las cosas que aprendí en el curso me ayudaron mucho a dar lo mejor de mí, ya que me sentía con confianza sobre lo que valorar en el sector», explica Donoso.

De las 220 personas que participaron en los itinerarios de comercio, hostelería o atención al público de la Cruz Roja el año pasado en A Coruña, 116 consiguieron un empleo, entre ellos varios jóvenes. Además, unas 1.360 personas de toda Galicia utilizaron los espacios de búsqueda activa de empleo de la entidad, con presencia en localidades como A Coruña o Betanzos.