Homenaje y reivindicación en el 40.º aniversario de la CEC

JUAN TORREIRO BERGONDO / LA VOZ

BERGONDO

CESAR DELGADO

Feijoo presidió la efeméride de la Confederación de Empresarios

22 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Pazo de Mariñán fue el marco para conmemorar el 40.º aniversario de la Confederación de Empresarios de La Coruña (CEC), creada un 24 de junio de 1977. Sobre las siete de la tarde arrancó el acto que reunió a más de 160 personalidades de diferentes ámbitos de Galicia, entre los que estaban la alcaldesa de Bergondo, Alejandra Pérez, y el regidor de A Coruña, Xulio Ferreiro, o la conselleira Beatriz Mato. La presidencia compartida del evento fue para el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, junto al presidente de la Diputación, Valentín González Formoso; el presidente de la CEC, Antonio Fontenla; y el presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), Antonio Garamendi. La cita sirvió para rendir homenaje a los pequeños, medianos y grandes empresarios de la provincia coruñesa.

Abrió el acto el presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, destacando el importante papel desarrollado durante estas cuatro décadas por la Confederación de Empresarios de A Coruña (CEC) en favor de la «unión e modernización do tecido empresarial coruñés, que é o motor económico de Galicia», afirmó. Formoso apeló a la creación de empleo porque «sen empresas non hai emprego e sen emprego non hai benestar».

Fecha histórica

«El 24 de junio de 1977 es una fecha histórica para el empresariado coruñés». Así comenzó su discurso Antonio Fontenla, el presidente de los empresarios coruñeses. Fontela habló de la unión empresarial, de la honradez, la unidad, el trabajo, el equipo y la solidaridad de todos los integrantes de la Confederación: «Somos una organización que se ha fortalecido con el paso del tiempo. Nuestra historia ha supuesto el triunfo de la libre empresa y de la economía de mercado frente a los maximalismos». El presidente de los empresarios miró al futuro, aprovechando la presencia de Feijoo, para reclamar la conexión ferroviaria del Arco Atlántico y el AVE.

Por último, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, clausuró el acto destacando la «madurez» de la institución. Feijoo tiró de su reciente viaje a China para argumentar el crecimiento de las exportaciones gallegas: «Galicia acadou a segunda mellor balanza comercial de todo o Estado ao sumar preto de 1.400 millóns de euros no que vai de ano, un aumento do 10,8 %». Feijoo reflexionó sobre la importancia de hacer un esfuerzo administrativo para rebajar el precio del suelo industrial para que las empresas se instalen en Galicia «non atopen con atrancos burocráticos e dispoñan de solo industrial de baixo custo».

El imperio Inditex creado por el empresario coruñés Amancio Ortega sobrevoló los discursos de Fontenla y Feijoo sin llegar a posarse. El presidente de los empresarios aludió a una «gran multinacional» que tiene su sede en A Coruña, y el presidente de al Xunta dijo que había dos señas de identidad gallegas radicadas en la provincia «e que geolocalizan Galicia no resto do mundo», una es el Camino de Santiago, y la otra «unha multinacional que todos coñecedes», pero sin nombrarla en ningún momento.