Okupa una casa en A Zapateira, la pinta y a los dos días la deja por la presión vecinal

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

ARTEIXO

Alberto Mahía

La Guardia Civil y el poder de convocatoria del WhatsApp del barrio convencieron a un hombre que no era «nada conflictivo»

30 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay una casa con una enorme finca en la Travesía da Xesteira, en la zona de A Zapateira que pertenece a Arteixo, en la que nadie vive. El pasado viernes por la noche, un miembro del grupo de WhatsApp de la asociación de vecinos lanzó un mensaje de auxilio: «Hola a todos, han okupado una casa en la Travesía de Xesteira y necesito vuestra ayuda». No pasó un minuto y ya eran decenas de personas las que se ofrecían para concentrarse frente a la propiedad. Se sumaron a la convocatoria residentes de urbanizaciones de A Coruña, Culleredo y Arteixo, que han hecho del WhatsApp de A Zapateira una «poderosa» herramienta que ahora en todos los barrios se quiere copiar. No hizo falta acudir a la casa como hicieron en otras ocasiones —lograron expulsar a los okupas de una mansión en la avenida de Nueva York y otra de Aguaceiros, así como evitaron otras usurpaciones por la rápida movilización—. En esta ocasión, el presidente de la asociación de vecinos, Juan Manuel Sánchez-Albornoz, se puso en contacto de inmediato con el alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, y este con la Guardia Civil. Una patrulla acudió al inmueble de inmediato. Si el okupa demostraba que ya se había establecido en la propiedad, nada se podía hacer. Y cuál fue la sorpresa de los agentes cuando se encontraron con que el hombre ya había pintado la casa por dentro, pues se encontraba en malas condiciones. Con eso le bastaba para argumentar que la ley impedía echarlo. Pero no fue así.

Tanto la Guardia Civil como el propietario se encontraron con un hombre que «no respondía a las características del típico okupa». Estaban ante una persona con problemas personales que se había metido en esa casa porque llevaba mucho tiempo sin habitar y pensaba que no le haría daño a nadie. Cuando se le comunicó que sí hacía daño, cogió sus cosas y se fue. De inmediato, el propietario llamó a una empresa de seguridad para instalar una alarma.

 Reacción

«Esta vez se solucionó todo de manera rápida y diligente. No se tuvo que intervenir más allá de la mediación del presidente de la asociación. Este es un ejemplo más de cómo funciona la unidad vecinal y su grupo de WhatsApp», explicó una de las personas que alertaron de la okupación. Una usurpación que apenas duró 48 horas.

Desde el colectivo vecinal se agradece la «rápida» respuesta del alcalde de Arteixo y de la Guardia Civil. Los agentes se presentaron en el domicilio cuando no habían pasado ni dos horas de la alerta lanzada desde la asociación. «Que sepan los okupas que en A Zapateira nos movemos rápido y ante cualquier sospecha, ya actuamos», avisa Ramón Lema.