Una isla entre la Cormelana y San Andrés

ARTEIXO

NOELIA REY

Gonzalo Somoza, ganador de la primera edición de los premios Incitus, abre mañana la taberna Koh Lanta

01 jun 2017 . Actualizado a las 11:41 h.

Mañana abre al público la taberna Koh Lanta en la Cormelana, esquina San Andrés. Reúne varios aspectos llamativos, por ejemplo que el proyecto de este negocio de comida tailandesa, vietnamita e indonesia fue el ganador de la primera edición de los premios Incitus, una iniciativa sin ánimo de lucro cuyo objetivo es dinamizar el sector hostelero en Galicia. «Más bien es una selección de platos del sudeste asiático», matiza el propietario.

Otro asunto original es el nombre. «Hice un viaje por Asia y en Koh (isla en tailandés) Lanta, en el mar de Andamán, surgió la idea porque estábamos en un hotel bastante selvático y nos ofrecieron una comida muy fresca y muy sana y pensamos que sería bueno tenerlo en Coruña. Quiero transmitir las sensaciones que yo experimenté», destaca Gonzalo Somoza, bajo unas luces que iluminan y decoran el techo del local y que recuerdan a los farolillos que se lanzan desde la playa en ocasiones especiales. Desarrollar la idea, buscar el local, formar el equipo (tiene tres cocineros) llevó su tiempo, pero ayer inauguró para invitados antes de la apertura de mañana. Venden las salsas con las que cocinan, solo utilizan para cocinar el wok, la plancha o el vapor. «La apuesta es por la cocina sana, que es la tendencia», apunta Gonzalo mientras me explica las características de la cocina tailandesa, que mezcla los sabores dulce, picante, agrio, amargo y salado, por ejemplo. Otro aspecto curioso es el servicio take away (para llevar), que permite disfrutar de la misma comida en casa a precios asequibles.

 Es el primer proyecto Incitus que ve la luz, a la espera de que Moncho Bargo, que ganó la segunda edición, ponga en marcha su local, que estará listo antes de Navidad.

Más de medio siglo

Entre unos y otros hay, más o menos, 55 años de diferencia. Les cuento. Los que posan a la entrada del edificio social de la Hípica son integrantes de la promoción de los Maristas que terminó los estudios hace 55 años, según indica en su mensaje Juan Folla Gárate. «No faltamos un años y seguimos siendo una piña. Por desgracia hay algunos compañeros que ya no están y otros que no se pudieron desplazar», destaca. Ahí los tienen, ojalá que los siguientes protagonistas también se junten desde de más de medio siglo.

Más despedidas

Sí, porque entre los anteriores y los siguientes alumnos hay más de medio siglo de distancia. Los chavales de los Dominicos y del IES Manuel Murguía de Arteixo posan felices en sus respectivos actos de graduación. Ahora se enfrentan al problema de las pruebas de acceso a la universidad. Los que se graduaron hace 55 años tienen otro tipo de problemas.