Pancho, ejemplo de adopción internacional, de colarse en el campo del Dépor en Abegondo a disfrutar de un retiro en Alemania

La Eurocámara ha pospuesto la ratificación del brexit por un nuevo desacuerdo con el Gobierno británico. Las repercusiones de ese acuerdo van más allá de lo comercial y laboral, aunque sea lo que más preocupa, existen muchos daños colaterales y en el Consorcio As Mariñas les preocupa también los efectos negativos que pueda tener en las adopciones internacionales llevadas a cabo desde Servigal. Es la adjudicataria del servicio de recogida de perros de la entidad supramunicipal, pero en sus instalaciones en Limiñón (Abegondo) también acogen animales de otros municipios de la comarca. Desde la empresa remarcan que si bien las adopciones internacionales se iniciaron hace años, en el 2020 han crecido de manera significativa, llegando a 77, un 35 % de las adopciones en la instalación el año pasado.

Este tipo de operaciones se impulsan por la colaboración entre Servigal y Asociación El Hogar de Wilbur. Desde la empresa de Abegondo se tramita ya directamente el certificado intracomunitario Traces con el que se gestiona la adopción. Los perros no van directamente a una familia, sino a un destino autorizado por la UE tras concertar su adopción. Entre ellos destacan Inglaterra y Escocia, pero también Alemania, aunque por número los más solidarios con esta causa han sido los ciudadanos de Swindon y Wimpole, pero también se han remitido a Edimburgo, Glasgow, Essex, Cumbria, Bristol, Brighton y Merseyside, entre otros lugares.

Mayores y sin pedigrí

Curiosamente, destacan desde Servigal, los animales que se demandan suelen ser perros que aquí, en Galicia, tienen menos salida. Perros mayores. Abueletes a los que quieren dar unos últimos años con calidad de vida. Les gustan de caza, por una cuestión cultural de Inglaterra, pero no piden que sean de raza. Al contrario, preguntan incluso por animales que lleven mucho tiempo en la instalación, los considerados invisibles, esos que pasan meses en las instalaciones. Se han llegado a adoptar perros por esta vía de 15-16 años.

Para encontrarles familia se les sacan fotos y vídeos para que vean su comportamiento con el personal de Servigal y con otros animales, incluso gatos.

La mayoría de los animales que les interesan son de una media de edad avanzada (8-11 años) aunque han salido de diversas edades, pero nunca cachorros ya que como aquí tienen muchas posibilidades de ser adoptados les interesan más los que saben que tienen dificultades para encontrar un hogar.

Servigal contabiliza el envío en un solo viaje de hasta diez perros, fue su récord, aunque tienen varios casos de trasladar ocho. Recuerdan a los primeros, Frida, Griffith y Kiara, todos ellos con historia, remarcan, ya que Frida era una mestiza de beagle con pánico a la gente, mientras Griffith y Kiara eran dos abueletes.

Hace unas semanas viajó uno solo, el basset Pancho que se va adoptado por una familia en Alemania. Es el perro que se coló en las instalaciones del Dépor en Abegondo hace unos meses. Tardó en darse en adopción ya que tenía problemas renales. Ningún animal sale en adopción hasta que se encuentra en condiciones, ni al extranjero, ni aquí, matizan.

Se deben realizar trámites con las autoridades veterinarias oficiales competentes para realizar el papeleo necesario y legal para que los perros viajen con todas las autorizaciones necesarias para cruzar la frontera de los diferentes países. Se trata de tramites que suponen una inversión de tiempo del veterinario del centro para lograr que el viaje de estos perros tenga un final feliz. Los perros deben ir con analíticas recientes y un certificado veterinario que dé cuenta de su estado de salud. Sobre todo para verificar que no tienen enfermedades infecciosas o patologías que pongan en peligro su vida durante el viaje. Dado que la mayoría de los animales son mayores, se les realizan limpiezas bucales para que el comienzo de su nueva vida sea en las mejores condiciones posibles.

Desde que se reserva el animal hay que llevar a cabo trámites burocráticos, esterilización, vacunaciones, pruebas analíticas, certificado sanitario de la veterinaria y la gestión del certificado intracomunitario Traces, así como la logística del transporte que tiene que ser reservada con antelación. No siempre hay hueco en dichos viajes porque el número de animales que pueden salir en cada uno es limitado, se tarda como mínimo un mes en que todo esté correcto para su traslado y adopción internacional. El transporte es un transporte autorizado por la UE, a una hora concreta, con un plan de viaje que cuenta con paradas estipuladas para el cuidado de los animales. En el caso de los que buscan su hogar en Reino Unido desde España pasan por Francia (con las autorizaciones necesarias de tránsito) para llegar a Reino Unido a través del Eurotunel. Aproximadamente son unas 48 horas de viaje.

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