La actuación, subvencionada por el proyecto Life Fluvial, absorberá 219.000 euros
13 ene 2021 . Actualizado a las 09:32 h.Un proyecto europeo eliminará las especies de flora invasora del entorno del embalse Abegondo-Cecebre. Algunas talas generaron suspicacias, por la especial sensibilidad que hay hacia ese espacio, pero estaban avaladas. Esta actuación está enmarcada en el proyecto Life Fluvial, que tiene como objetivo mejorar el estado de conservación de los corredores fluviales y humedales asociados a estos. En total, se han repartido 3 millones de este proyecto europeo, en varias zonas de la Rede Natura, de la Reserva de Biosfera de Mariñas Coruñesas, así como en las de Terras do Miño y en Asturias.
«No encoro de Abegondo-Cecebre actuouse sobre 8,6 hectáreas, mediante a eliminación de especies invasoras, que é un dos problemas que tiña este espazo (plumero de la pampa (Cortaderia selloana), o cartucho (Zantedeschia aethiopica) o a crocosmia (Crocosmia x crocosmiiflora); especies arbustivas como hortensia (Hydrangea spp), e arbóreas como acacias (Acacia dealbata, Robinia pesudoacacia), eucaliptos (Eucalyptus spp.), chopo híbrido americano (Populus x canadensis), pino de Monterrey (Pinus radiata), pino negral (Pinus pinaster) ou mimbreras (Salix vimininalis, Salix fragilis)», explica el gerente de la Reserva de Biosfera, Jorge Blanco.
Los trabajos se realizaron tras la identificación de las distintas especies, actuando selectivamente, individuo a individuo, y respetando la vegetación nativa. En cuanto a la eliminación, se llevó a cabo manualmente, salvo para la retirada de grandes plantas, como las especies arbóreas o los plumeros de la pampa de gran peso, para lo que se recurrió a medios mecánicos. En ningún caso Life Fluvial respalda al uso de herbicidas, al desarrollarse en espacios frágiles con ecosistemas de elevada vulnerabilidad y de carácter prioritario.
El proyecto junto a la presa, presupuestado en 219.762 euros, está ya ejecutado al 50 %», precisa Blanco, que indica que durante el 2020 se eliminaron los ejemplares invasores y este año se trabajará en controlar si hay rebrotes, así como en realizar una restauración ambiental con la «prantación con especies propias deste hábitat: salgueiro, freixo, bidueiro, carballo, pradairo, ou sanguiño». Blanco se apresura a reconocer que más allá de esta actuación, el estado del espacio en general es «bo, sendo as zonas de ribeira as que presentaban máis problemas de invasoras, probablemente porque a xente tiña nos seus xardíns esas plantas e as acaban espallando ao medio natural». Además, precisa que Emalcsa está realizando un «esforzo moi grande na correcta xestión deste Espazo Natural Protexido, do que se abastecen 450.000 persoas, pois os terreos son da súa propiedade».