LeLaine, alfombras que cuentan historias tejidas por mujeres en Marruecos

Patricia García Lema
Patricia García A CORUÑA

A LA ÚLTIMA

EDUARDO PEREZ

Después de un viaje en 2018 a Marrakech, Emma decidió trasladar desde A Coruña el trabajo de las tejedoras marroquíes y vender sus alfombras y cojines hechos artesanalmente, con tintes naturales y respetando sus tradiciones

24 abr 2021 . Actualizado a las 22:28 h.

«Soy muy profunda y miro todo desde el corazón». Emma López de Heredia habla casi como si estuviese narrando un cuento. Esta aventurera coruñesa lleva media vida recorriendo el mundo. Le encanta el surf y escuchar las historias de la gente. En 2018 viajó con su hermana a Marruecos. «Era el primer viaje que hacíamos juntas de adultas». Allí descubrió el mundo de las alfombras artesanas: «Decidí investigar un poco más, pero simplemente por curiosidad. Fui descubriendo sus historias, que las mujeres tejen las alfombras contando sus vidas y que las utilizan para protegerse del frío y que solo las venden por necesidad. Me pareció alucinante, quedé dándole vueltas y pensé que tenía que contarle eso a la gente, que tenía que hacerlo de alguna manera». Hizo un segundo viaje y el flechazo fue total. Fue como descubrirme a mí misma y a mi infancia ya que soy mitad andaluza y siempre he estado rodeada de elementos árabes de pequeña». Y así fue como decidió crear LeLaine, una marca de alfombras y cojines hechos artesanalmente en Marruecos por mujeres, «que cuentan historias nudo a nudo».

Para Emma, Marruecos es un lugar lleno de paz y de vitalidad: «Me parecieron increíbles esas vidas de color tejidas desde el corazón y poder llenar así los hogares de historias profundas». Esta coruñesa también vio en este proyecto la oportunidad para desarrollar su creatividad. Sus alfombras pueden verse y comprarse en Alnuss, en el número 3 de travesía de Huertas. Allí se pueden encargar a medida algunas de las alfombras que Emma descubrió en su cuarto viaje a Marrakech. «Me fui a las montañas del Atlas a la aventura y descubrí un poblado chiquitito de mujeres tejedoras. Es una tribu nómada que se muda de lugar, que vive por y para sus animales, en plena naturaleza y que solo usan la lana de estos animales, que es muy suave». Emma enseña una de las alfombras: «Las grandes las tejen hasta ocho mujeres a la vez. Esta tribu es capaz de plasmar en la alfombra un producto totalmente renovado». Los colores, cuenta, los consigue «con tintes naturales, utilizan frutos o cáscaras de alimentos para teñir». Emma se imagina la alfombra en una casa de Nueva York, «contando esas historias de las mujeres tejedoras».

EDUARDO PEREZ

LeLaine significa lana. Estas alfombras que descubrió en el Atlas Medio son una de sus grandes apuestas. Entre sus alfombras y cojines hay trabajos de más tribus. Todos están hechos de forma artesanal y con fibras naturales: «Se tejen a mano uno a uno, con mucha dedicación y cuidado, con sus irregularidades, y respetando a sus artesanos, su cultura y su historia».