Patines y bicis ganan la batalla de la movilidad sostenible en el Día Sin Coches de A Coruña

Tamara Rivas Núñez
T. Rivas A CORUÑA

A CORUÑA

La calle Manuel Murguía fue el escenario de diferentes actividades para fomentar el uso del transporte alternativo y concienciar en educación viaria

22 sep 2024 . Actualizado a las 22:35 h.

Muchas ruedas giraron sin descanso durante buena parte de la mañana de este domingo sobre el asfalto en Manuel Murguía. Y aunque la frase pueda sonar a algo habitual, el componente que la hace diferente es que, esta vez, las ruedas pertenecían a patines, bicicletas y patinetes y no a los habituales vehículos que a diario circulan por la vía. Un año más, la movilidad sostenible ganó la batalla al vehículo particular en el Día Sin Coches con el que se puso fin a la Semana Europea de la Movilidad. 

Multitud de familias y participantes de la Carrera de la Mujer se acercaron aprovechando la buena mañana para, de una manera lúdica, tomar conciencia sobre la importancia de apostar por el transporte sostenible. «Es cierto que se ha avanzado mucho de la mano de Europa, pero todavía falta camino por recorrer. Necesitamos más zonas, más carriles bici, más conexión entre ellos y también más concienciación», señaló Iván Rama, presidente de Galicia Rollers, un club que fomenta el patinaje como forma de ocio saludable, deporte de competición y como medio de transporte ecológico y alternativo. 

Todo aquel que quiso pudo enfundarse en los patines que cedía el club y tener una primera toma de contacto de la mano de sus instructores. «É máis divertido patinar na rúa que no parque», comentaba Aldán, de 4 años, mientras patinaba de la mano de su padre. Para Icía, otra pequeña de la misma edad, era su primera vez. Y aunque el equilibrio le jugó alguna que otra mala pasada, no paró de sonreír. «Botou bastante rato, pensei que non ía aguantar tanto. Tal vez lle esperte o gusanillo», comentaba su madre.

Pegada a la zona en la que Galicia Rollers exhibía todas las modalidades deportivas con las que cuenta el club se instaló un circuito, que los más pequeños recorrieron en bicicleta obedeciendo en todo momento a las diferentes señales de tráfico con las que se encontraban en su camino. El pedaleo transcurría entre rotondas, stops, pasos de peatones y dobles direcciones, pero los niños hicieron gala de una excelente seguridad viaria. «Son infinitamente más respetuosos con las normas que los mayores», sostuvo Diego Someso, responsable de educación vial de la Policía Local. Desde su departamento han puesto en marcha una campaña de formación en materia de movilidad en los colegios con la que han llegado a más de 4.500 alumnos. El objetivo que persiguen es que los niños integren e interioricen desde pequeños las normas y que a través de ellos, esa normativa llegue también a sus casas. «Los niños son los que más sancionan a los mayores. Pero todavía queda camino y falta por educar en nuevas formas de movilidad», advirtió el agente.