El «shakirazo» de la alcaldesa

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

MIGUEL MIRAMONTES

Hay que reconocerle a Inés Rey su buen humor, porque no es tan habitual entre los que nos gobiernan enfundarse el disfraz para darlo todo en la fiesta

23 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Antes de la pandemia hubo un tiempo en el que el carnaval estaba de bajona. Mientras Halloween empezó a subir puestos entre los más jóvenes, el entroido coruñés semejaba que iba perdiendo fuelle. Era una percepción que iba unida, es cierto, a épocas de mal tiempo. Si llovía a cántaros o el temporal arreciaba, los coruñeses sentíamos que el carnaval decaía en la pereza de la mojadura. Pero, claro, en la vida después de la pandemia, con el sol a nuestro favor, los coruñeses nos hemos venido arriba y hemos tomado la calle como si no hubiera un mañana. Qué espíritu y qué alegría. Hacía mucho tiempo que no se veía a la gente tan animada en un ambiente que ya empieza a pedir su coronación como el carnaval de Cádiz. Ahora que los gallegos hemos triunfado allí con la chirigota Fariña de sus ojos, con ese acento que ha llevado a bailar a los gaditanos la muiñeira, nosotros nos hemos contagiado del espíritu carnavalero del que siempre han hecho gala en el sur. Porque esta vez la fiesta sí se coció más que nunca en la calle. Y entre Merceditas y Alvarito, el choqueiro del Sambódromo coruñés, la comparsa de Ayuso llevando a Feijoo como una marioneta y cantando «Una loba como yo no está pa tipos como túuu» y el shakirazo de la alcaldesa, Coruña ha recuperado su esplendor.

Hay que reconocerle a Inés Rey su buen humor, porque no es tan habitual entre los que nos gobiernan enfundarse el disfraz para darlo todo en la fiesta. Y la alcaldesa se ha marcado un shakirazo dando buena muestra de que si hay que liderar el entroido, se lidera con toda la buena onda, dejando de la lado todos los malos rollos de la política. Claro que eso no quita para que con gestos como el suyo no se haga marca personal para ganar votantes. El martes ya alguno le daba a Inés Rey un concejal más.