«Walkie-talkies» para regular el tráfico en el entorno del colegio Andaina de Culleredo
A CORUÑA
El colapso por la estrechez de los accesos obliga a auxiliar a los buses
02 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Chaleco amarillo, mascarilla y un walkie-talkie. Así va todos los martes Juan Fernández, personal de mantenimiento del colegio Andaina, situado en A Zapateira, a regular el tráfico en la rúa Roma, a la altura del Coruña British International School, para que pueda pasar el bus que lleva a escolares a la piscina de Rialta a las cuatro de la tarde. Es la solución que han ideado desde el centro para evitar que el transporte quede atrapado en un tramo con dos curvas pronunciadas. Desde el colegio le avisan de que sale el bus y él para el tráfico de subida. La cola de coches llega, en pocos minutos, cerca de la avenida de Nueva York, la general que conecta la vía a la universidad con la rotonda de la tercera ronda.
Algunos conductores se muestran impacientes porque van a recoger a los pequeños, pero es la única manera de garantizar que el autobús no quede parado. Este martes se retrasó, porque es tal el número de coches que aparca junto al colegio que a veces se complica incluso su paso.
40 minutos de atasco
El problema de tráfico no es nuevo, pero se ha agravado desde septiembre con los cortes por obras de otras vías de acceso. «A semana pasada eu estiven parada 40 minutos e cheguei unha hora tarde ao colexio, isto é un caos», comenta Corona Romero Rodríguez, presidenta de la AMPA, con dos niños en un centro que supera los 400 alumnos. Explica que han transmitido de manera reiterada sus quejas al alcalde de Culleredo, José Ramón Rioboo, y también han buscado la colaboración del Concello de A Coruña porque parte de los accesos están en su territorio.
Corona Romero asegura que, de manera inexplicable a su entender, en la reordenación realizada de A Zapateira hace unos años quedaron justo las calles del entorno del centro sin ser de única dirección. Explica que desde Andaina hicieron recomendaciones a las familias de cómo utilizar unas vías para entrar y otras para salir, pero desde la AMPA reclaman a los consistorios que se pongan de acuerdo, porque sigue habiendo conductores que las usan indistintamente, ya que también son utilizadas por vecinos del entorno, y más ahora que las obras complican aún más el acceso.
«Nos orzamentos participativos da Coruña aprobárase un camiño seguro para os escolares, pero non se fixo, e tamén Culleredo tiña unha partida reservada de 30.000 euros para melloras, pero se non se executa....», cuestiona la representante de los padres.
«O último escrito metémolo por rexistro o 20 de decembro, con fotos e sabemos que dende o cole tamén chaman ao Concello, pero parece que non hai interese», cuestiona. Desde Culleredo les ofrecen ahora adquirir una finca para crear un nuevo aparcamiento, cuando, remarca, esa no es su prioridad. «Nunca pedimos iso, o colexio foi conseguindo fincas, só pedimos que regulen o tráfico e que tapen as fochancas e nin tan sequera as tapan», apunta. Precisa también que la situación empeora cuando llueve, porque en algunos tramos de la rúa Roma se inundan.
Desde el consistorio cullerdense insisten en que intentará llegar a acuerdos con A Coruña para mejorar los accesos a Andaina. Su propuesta pasa por hacerlo por la rúa Aguaceiros y por consensuar posibles cambios de dirección en los horarios de mayor afluencia a este centro, ya que la ampliación no es posible por «la proximidad de viviendas unifamiliares con sus respectivos cierres perimetrales». Remarcan que técnicos municipales y una asistencia técnica contratada analizaron la situación, pero no ven posibilidad de acometer un acceso alternativo debido a «que la parte trasera del centro está rematada por un talud que imposibilita vías alternativas».
El problema no solo es para el acceso rodado. No hay aceras que faciliten ir a pie del colegio a la parada de bus urbano. «Es un peligro», remarcó una madre que el martes no pudo llevar el coche.