Una camarera salva con la maniobra de Heimlich a una mujer que se atragantó en A Coruña cuando comía

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Iria Taboada, la camarera de A Mundiña que salvó a una clienta de un atragantamiento gracias a la maniobra de Heimlich
Iria Taboada, la camarera de A Mundiña que salvó a una clienta de un atragantamiento gracias a la maniobra de Heimlich

«Corrió a donde estaba, la rodeó por atrás, le dio golpes secos con el puño cerrado en la boca del estómago y al momento lo expulsó», explicaron en el restaurante

17 ene 2023 . Actualizado a las 18:46 h.

Un susto pero de los gordos zarandeó este lunes a una mujer y al personal del restaurante A Mundiña en un reservado del establecimiento de la calle Real. Acababan de grabar unas imágenes de camarones, centollas y pulpo para un reportaje gastronómico, cuando el responsable del negocio, Álvaro Ameijenda, les propuso que se quedaran a comer. «No tenía sentido que se marcharan con la comida hecha. Por lo menos que probaran el pulpo. Ellas no querían, porque habían venido a hacer la entrevista, pero al final las convencí, y efectivamente, una de ellas se atragantó con un trocito de pulpo con pan, y pasamos un apuro, sí», cuenta Ameijenda, satisfecho de la rapidez con que Iria Taboada, una de las camareras, actuó nada más advertir la situación comprometida en que se encontraba la periodista.

«La vio levantarse apurada y al momento se dio cuenta. Corrió a donde estaban, la rodeó por atrás y le hizo la maniobra de Heimlich, agarrándola por la espalda y dándole golpes secos con el puño cerrado en la boca del estómago. Al momento lo expulsó, era muy pequeño, un hueso a lo mejor no sale tan fácilmente», explica el empresario, que recuerda otro caso de un hombre al que él mismo le hizo la maniobra en la antigua taberna de la calle de la Estrella. «No se puede esperar a la ambulancia y a que entre en parada. Hay que reaccionar al momento e intentar resolverlo», concluye Álvaro Ameijenda, que todos los años promueve una actividad de formación en primeros auxilios para los trabajadores.

«Hoy he estado a punto de morir atragantada. En el restaurante #AMundiña de #ACoruna, la camarera Iria me ha salvado la vida con la maniobra de #Heimlich, que deberíamos saber todos. El dueño, Álvaro, y demás personal han sido un amor. Gracias», publicó en Twitter Taciana Díaz, aún con el susto en el cuerpo.